El Princesa Sofía alzó el telón. La primera gran prueba del calendario balear se apoderó durante la jornada de ayer de la bahía palmesana y fue testigo del estreno que vivieron las embarcaciones de vela ligera, que pudieron completar con éxito las regatas previstas.
El programa se puso en marcha con un leve retraso, hasta que el viento sur-suroeste fue ganando en fuerza para mantenerse con una intensidad entre los 6 y los 9 nudos durante la celebración de las pruebas. Cada una de las clases llegó a disputar hasta tres regatas a excepción de la Dragon y la Finn, que llevaron a cabo sólo dos.
La mallorquina Marina Gallego ocupa el segundo puesto en la general provisional de la clase Europa, la más numerosa de la prueba, por detrás de la argentina Serena Amato. La regatista isleña se adjudicó la primera regata del día y desplazó a la catalana Neus Garriga hasta la posición 31. El buen nivel de los regatistas españoles masculinos es evidente y Manuel Jiménez figura en cabeza, mientras que Jaime Navarro es el mejor local tras colocarse sexto.
En el Club Natútico de Palma el dominio recae sobre los participantes alemanes. Schumemann, Wiebke y Lippert se han destacado en la clase Yngling, mientras que en Dragon son Müller, Hoesch y Gunn los que han cuajado un mejor comienzo.
Ben Ainslie confirmó su papel de favorito tras asegurarse dos primeros puestos en clase Finn. Rafael Trujillo acabó en quinto lugar la jornada y en 470 se produjo la sorpresa después de que las danesas Susanne y Michaela Ward pudieses con la favoritas de su apartado. En hombres lideran la regata los argentinos y medallistas olímpicos, Conte y De la Fuente. Martínez y Wood, en el puesto 22, son los mejores participantes nacionales.
En clase Láser, que ha establecido su base en Calanova, el sueco Daniel Birgmark fue el mejor del día y en el cuarto puesto aparece Luis Martínez Doreste.