Un año más, la Hermandad de Alfonsinos vivió su encuentro anual, una cita en la que la memoria y las raíces del Real Mallorca ocupan un lugar preeminente. Con el objetivo de conmemorar sus primeros cuarenta y cuatro años de existencia, y en fechas cercanas al 88º aniversario de la fundación del Real Mallorca -cuya denominación original fue la de Real Sociedad Alfonso XIII-, las figuras más representantivas de la larga historia de la entidad se reunieron y tributaron un merecido homenaje a Jaume Rosselló, presidente del Mallorca entre los años 1956 y 1963.
El mandatario fue el artífice del primer ascenso del cuadro balear a la máxima categoría y encabezó una era prodigiosa para el conjunto que habitaba por entonces en la Plaça Barcelona.
La jornada se inició con una ceremonia en recuerdo de los Alfonsinos ya fallecidos, y acto seguido, se realizó la asamblea y un almuerzo en el que el presidente de la Hermandad, Pep Buades, y la Asociación de Veteranos, encabezada por Joan Forteza, entregaron diversos obsequios y reconocieron la labor del ex presidente Jaume Rosselló. Pau Nadal, Antoni Planas y Miguel Garro representaron a los diferentes estamentos del Real Mallorca, mientras que entre las autoridades presentes, destacó Pere Rotger, presidente del Parlament.