El entrenador del Barcelona, Frank Rijkaard, está convencido de que su equipo puede tropezar en cualquier partido de Liga, pero no cree que sea porque está relajado, ya que considera que el Barça justamente acaba de empezar a posicionarse en la Liga. Rijkaard entendería algún indicio de relajación «si el equipo hubiese ganado muchos títulos», pero precisó que el Barcelona «a penas acaba de empezar».
El entrenador barcelonista está muy confiando de las opciones y posibilidades de su equipo de mantener la buena racha de partidos ganados en la Liga (seis seguidos) y ha desveló que la «fuerza del conjunto» se encuentra en que los jugadores «que tienen que entrar, hacen su trabajo lo mejor posible. El equipo esta más equilibrado. Es posible que llegue algún día la derrota, pero tenemos otra mentalidad y el conjunto es más fuerte psicológicamente hablando».
Contra el Mallorca, a Rijkaard se le plantea un problema en el equipo, porque la baja de Javier Saviola (sancionado) y de Patrick Kluivert (lesionado) le ha dejado sin delantero centro. «Tenemos varias opciones», subrayó Rijkaard, quien no quiso desvelar qué jugador ocupará la demarcación de delantero centro, aunque ha definido al jugador que lo hará: «Un jugador que participe como delantero centro tiene que ser capaz de trabajar mucho, hacer presión al oponente, estar en los momentos correctos en el área y funcionar para el equipo. Uno tiene más características que el otro, pero hay varias opciones en este equipo».
Rijkaard insistió en que ve «disfrutar» al equipo, gracias a los buenos resultados, y está convencido de que el Barça no caerá en la euforia. «Los jugadores están convencidos de que hay que seguir trabajando. Lo veo en sus caras y estoy tranquilo», finalizó el técnico del Barcelona.