Xisco Cruz (Moscú)
Apenas sin tiempo para digerir el empate de Pamplona, con pocas horas para masticar el punto, el Mallorca se ha encontrado repentinamente con la UEFA. El equipo de Luis, pendiente todavía de descifrar el epílogo del partido ante Osasuna -el club ha decidido impugnar el encuentro alegando una alineación indebida del delantero australiano John Aloisi-, tomó tierra ayer en Moscú. Fue un viaje al centro del frío, a una ciudad inhóspita que recibió a la expedición con una tímida nieve y una temperatura moderada. Eso permitió no alterar el guión, por lo que la plantilla se ejercitó por la tarde en los terrenos de la Spartak Academy sobre una superficie de hierba sintética.
El Mallorca no ha viajado hasta la capital de Rusia para hacer turismo -a pesar de que los jugadores visitarán hoy la Plaza Roja-. Aragonés ya anunció tras la eliminación de Copa que eso iba a abrirles la persiana de la UEFA y el Spartak parece el rival ideal para seguir avanzando en el torneo. A pesar de que el técnico ha dejado en Palma a gran parte de su armamento, el potencial del equipo balear es muy superior al del conjunto ruso, que llega zarandeado por las sanciones de Titov y Pavlenko. Por eso, y porque el Mallorca tiene la coartada de jugar el partido de vuelta en su estadio, todo tiene buena pinta. Todo salvo los elementos, que no entienden de presupuestos.
La nieve y el hielo son la principal obsesión de Luis Aragonés, que por eso ordenó ayer un entrenamiento sobre moqueta. El bote del balón y la rapidez con la que circula en esa superficie es muy similar a la de un estadio helado; porque eso es lo que se va a encontrar el Mallorca en el Lokomotiv Stadium, un césped pelado y un terreno de juego duro e irregular. El Mónaco de Didier Deschamps comprobó ayer en su cita de la Liga de Campeones ante el Lokomotiv que manipular la pelota en esas condiciones es extremadamente difícil, y tuvo que recurrir a la estrategia y al juego aéreo para compensar su falta de adaptación. Acabó acicalando el marcador gracias a un gol de cabeza de Morientes, pero durante muchos minutos estuvo cerca de encajar una goleada ante un rival que mejoraba a medida que la nevada crecía. Horas después, llega el Mallorca.