Efe|LOS ÀNGELES
El Staples Center de Los Angeles será escenario este fin de semana
de la 53 edición del All Star Game de la NBA, en la que en el
partido entre conferencias del próximo domingo, que será el plato
fuerte de esta fiesta de las estrellas, el conjunto del Oeste
tratará de demostrar su superioridad sobre el Este. Toda la
parafernalia de Hollywood que rodea a Los Angeles, que albergará el
acontecimiento por cuarta vez en su historia, hará que el Staples
Center sea una verdadera convención de estrellas con la oportunidad
de ver en la misma cancha a Allen Iverson, Tracy McGrady o Vince
Carter, por el Este, ante los Tim Duncan, Kevin Garnett, O'Neal y
Kobe Bryant, por el Oeste, y en las gradas a los grandes del cine
americano.
Lo que no habrá este año será presencia española a lo largo de este fin de semana de fiesta de la NBA después de que Pau Gasol (Grizzlies) no haya podido ganarse un hueco para su primer All Star, tras haber estado los dos últimos años en el partido de novatos, y Raúl López (Jazz) se haya quedado fuera del choque de rookies. Casualmente el partido de novatos fue el que abrió anoche el espectáculo con el atractivo de la presencia de los dos rookies que mejor sabor están dejando este año, LeBron James (Cavaliers) y Melo Anthony (Nuggets).
Pero el plato fuerte estará en el concurso de triples y mates. En el lanzamiento desde larga distancia el serbio Pedrag Stojakovic (Kings) buscará igualar a Larry Bird y Craig Hodges. El Partido de las Estrellas, tras perder un poco de interés en los noventa para los jugadores, ha ido ganando en los últimos años en intensidad. Como ejemplo el del año pasado en Atlanta, que tuvo el añadido de ser el último de Michael Jordan. El resultado final de 155-145 para el Oeste tras dos prórrogas, con el MVP para Kevin Garnett, fue una auténtica demostración de ansias por la victoria en ambos equipos. Por ello, el Este tratará en esta ocasión de tomarse la revancha.