Son Moix cumple 100 partidos. El estadio mallorquinista, inaugurado en el verano de 1999 con el Real Madrid como testigo, alcanzará el próximo domingo el umbral de la centena con otro invitado de lujo, el Fútbol Club Barcelona. Entre medias, han transcurrido cuatro años y dos meses durante los cuales el Real Mallorca ha disputado 99 partidos oficiales, con un balance de 51 victorias, 25 empates y 23 derrotas, 159 goles a favor y 119 en contra. Todo comenzó el 21 de agosto de 1999, en la primera jornada de Liga. El Mallorca de Mario Gómez recibía al Real Madrid de John Benjamin Toshack. La curiosidad inundaba los aledaños del estadio de Son Moix, un recinto estrenado unas semanas antes con motivo de la Universiada de Palma y que esa calurosa tarde de sábado abría por primera vez las puertas para acoger un partido de fútbol. Carlos Domínguez entró en la Historia del club al conseguir el primer gol en Son Moix. En el minuto 90, el Mallorca saboreaba un estreno triunfal. Pero no fue así. El Real Madrid remontó en un minuto gracias a Raúl y Morientes y frustró el debut.
Desde aquella tarde, Son Moix ha sido testigo de alegrías y tristezas. De goles y lesiones. De broncas y abrazos. Por el cuidado césped han desfilado algunos de los mejores jugadores del mundo, desde Zidane hasta Ronaldo pasando por Anelka, Trezeguet, Barthez, Henry, Vieira o recientemente David Beckham, que vivió su estreno oficial en España en este escenario. Son Moix ha acogido partidos de alta tensión, como aquel dramático encuentro ante el Valladolid que desembocó en la permanencia y otros de ilusión, como el inolvidable debut en la Liga de Campeones frente al Arsenal.
Son Moix no vivió un estreno precisamente agradable. Tan solo cuatro días después de la derrota ante el Madrid, llegó un día señalado en negro en la historia del club. El 25 de agosto de ese año, la Isla se preparaba para festejar el pase a la Champions. Pero el Molde, un desconocido equipo noruego, empató 1-1 y provocó la que hasta el momento es la mayor decepción que se recuerda. El estigma de gafe desapareció poco a poco. El equipo encadenó una racha de trece partidos consecutivos sin perder y en Son Moix doblaron la rodilla consecutivamente el Valencia de Cúper (7.11.99), el Barça (28.11.99) y el Ajax (9.12.99). Esa misma campaña, sin embargo, quedaron selladas algunas derrotas sangrantes, como el 1-4 firmado por el Galatasaray (16.3.00) o la eliminación copera a manos del Ourense (12.1.00).