El fichaje de José Manuel Esnal «Mané» por el Real Mallorca será una realidad tangible en las próximas horas y de esta forma, lo que era un secreto a voces, se convertirá en un hecho con la destitución de Jaime Pacheco como máximo responsable técnico del club insular. De esta forma, «Mané» retorna al banquillo balear después de un breve paso durante la temporada 95/96, en la que sirvió de puente entre José Antonio Irulegui y Víctor Muñoz. El preparador natural de Balmaseda (Vizcaya) era uno de los eternos candidatos que ocupaba siempre un lugar destacado en la agenda del secretario técnico del Real Mallorca. Los contactos han sido permanentes, aunque no se llegó a concretar una operación que pudo llegar a buen puerto el pasado mes de junio, cuando «Mané» y el Real Mallorca volvieron a entablar un diálogo ya habitual en los últimos años, pero que adquirió una forma más consistente después de que el técnico vasco fuera destituido oficialmente como primer entrenador del Deportivo Alavés.
A sus 53 años, «Mané» es uno de los técnicos más respetados del fútbol español, con una trayectoria en la que la llegada del Alavés marcó un punto de inflexión. En la entidad vitoriana vivió sus mejores momentos como profesional de los banquillos. En seis años pasó de la Segunda División a perder en la prórroga la final de la Copa de la UEFA ante el Liverpool. Una mala resaca continental forzó su despido y el descenso de los vitorianos a la Segunda División. Desde entonces, se ha dedicado a seguir de cerca las evoluciones de los diferentes conjuntos de la máxima categoría. «Mané» ha sido testigo directo de la derrota rojilla en San Mamés (4-0) y ha podido sacar sus propias conclusiones sobre los que serán sus pupilos, al menos hasta el final de la temporada en curso, en la que tendrá el cometido de enderezar el rumbo perdido en un accidentado inicio de Liga.