Albert Orfila|NICOSIA
Jaime Pacheco no ha querido camuflar los galones que porta su
equipo en esta eliminatoria europea. El técnico del Mallorca tiene
claro que su equipo es el favorito, aunque también se ha apresurado
a exigir muchos gramos de humildad para no salir malparado de la
cita de esta noche. «El fútbol español está por encima del
chipriota en términos generales y está claro que debemos asumir
nuestro papel. De todas formas, también tenemos bastante claro que
nadie nos regalará nada y no será fácil. Habrá que trabajar mucho y
bien para superar a este primer rival», significó el entrenador
balear durante su encuentro con los periodistas.
El preparador portugués, que la temporada pasada visitó Chipre sentado en el banquillo del Boavista, admitió su preferencia por «disputar el primer partido fuera y el segundo en casa», aunque también otorgó una trascendencia especial al hecho de «marcar algún gol. Afrontar el partido de vuelta sin haber marcado puede resultar peligroso. Hoy en día, el fútbol está muy equilibrado. Todos los equipos están bien organizados y trabajan bien sobre el campo, eso significa que el Apoel o cualquier otro equipo aparentemente inferior pueden darte un disgusto sino trabajas bien a lo largo de toda la elimiantoria».
Pacheco reconoció abiertamente que alineará a un equipo prácticamente idéntico al que jugó el domingo pasado ante el Sevilla. «No soy partidario de realizar cambios, a no ser que vengan forzados por las lesiones o las sanciones, o bien esté disconforme con el rendimiento de algún futbolista. La verdad es que estoy contento con las cosas que hizo el equipo en el último partido de Liga y no tengo previsto realizar ningún cambio. ¿Miki o Leo Franco?. Ambos me inspiran máxima confianza, podría elegir sin mirar y me sentiría muy tranquilo. Miki ha actuado a un gran nivel en los dos partidos que ha jugado. Era una prueba de fuego y la ha superado». El entrenador del Mallorca se refirió al Apoel destacando a sus dos hombres de ataque y su buena disposición sobre el terreno de juego. «Estos equipos suelen crecerse en este tipo de partidos, para ellos son casi los más importantes de la temporada. Es una excelente oportunidad para que sus jugadores se den a conocer a toda Europa y su motivación será máxima. El público también les ayuda mucho, aunque lo que más me preocupa es lo nosotros seamos capaces de hacer y lo que podamos dejar de hacer. El equipo está tranquilo y también concienciado de que habrá que sufrir para superar esta eliminatoria».