Mateo Alemany, presidente del Real Mallorca, destacó ayer las grandes diferencias existentes con el Atlético de Madrid para el traspaso del «Caño» Ibagaza y Albert Riera, tras celebrarse en la noche del martes las primeras negociaciones. El presidente del club balerar dejó claro tras la Asamblea de la Liga de Fútbol Profesional, que no va a malvender a Ibagaza y Riera, dos de los futbolistas más importantes del equipo bermellón. «La salida de Ibagaza y Riera está muy difícil. Estuvimos hablando ayer con el Atlético de Madrid y la verdad es que hay muchísima diferencia», explicó.
Pese a reconocer en un principio los contactos que mantuvo anteayer con la directiva atlética, Alemany, preguntado por las condiciones de los fichajes, no quiso entrar a desarrollar la diferencia económica que separa a los dos clubes. «Yo no voy a explicar en que términos pero las diferencias son muy grandes, por lo tanto, por el momento se van a quedar con nosotros, lo cual está muy bien», afirmó. Otro de los jugadores que está en la lista de futuribles de varios conjuntos es el camerunés Samuel Eto'o. El presidente del Mallorca desmintió que el Valencia haya realizado una oferta por el delantero y sí reconoció otras propuestas. «Con el Valencia de momento no hay negociaciones abiertas y lo que existe es interés de otros equipos». Asimismo, dejó claro que la postura de su club es «esperar» y que si no llega ninguna oferta por el delantero, a quien calificó como «el jugador más importante» del equipo, Etoo regresará al trabajo, como el resto de sus compañeros, el próximo lunes.
«Ni Real Madrid (que percibiría un porcentaje de la cantidad que reciba en Mallorca en un posible traspaso) ni el Valencia se han dirigido a nosotros», sentencó Alemany, a su salida de la Asamblea General de la Liga de Fútbol Profesional. Alemany se negó también a referirse a la posible carambola de la que se habla y que significaría el fichaje de Etoo por el Valencia y la marcha del central argentino Roberto Ayala al Real Madrid, en una operación a tres bandas en la que el Mallorca se niega a entrar.