Efe|GRENOBLE (FRANCIA)
El estadounidense Lance Armstrong demostró una excelente puesta a
punto para el Tour de Francia al obtener ayer la victoria final en
el criterium Dauphiné Libéré por delante del español Iban Mayo
(Euskatel).
El francés Cedric Vasseur fue el vencedor en solitario de la séptima y última etapa, disputada entre Briançon y Grenoble sobre un recorrido de 174 kilómetros. Vasseur llegó a la meta con un minuto y 59 segundos de ventaja sobre su compatriota Christophe Edaleine y 2:13 sobre el grupo de favoritos encabezado por Iban Mayo, Christophe Moreau y Lance Armstrong.
Al igual que sucedió en la etapa del sábado, los ciclistas españoles se convirtieron en los grandes animadores de la jornada. Iker Flores (Euskatel) lanzó el primer ataque cuando apenas se habían cubierto los diez primeros kilómetros. Pero fue rápidamente neutralizado.
En el descenso de Lautaret se produjo una nueva escapada, compuesta por siete corredores, entre los que estaba Mayo, que llegaron a disponer de ocho minutos de ventaja sobre el pelotón. El propio Armstrong se vio abocado a tomar la iniciativa para neutralizar esa fuga. Vasseur, a la postre vencedor de la etapa, inició su escapada en solitario en la subida al alto del Coq. El ciclista francés fue ampliando paulatinamente su ventaja hasta cruzar en solitario la línea de meta.
En el grupo perseguidor, el francés Christophe Edaleine (Jean Delatour) se impuso en el esprint y finalizó en segundo lugar, a 2 minutos de Vasseur. Mayo fue tercero a 2:09.
A la hora de valorar la trascendencia de esta victoria en los albores del Tour, Armstrong dejó claro que «lo mejor de esta semana ha sido mi cronoescalada, donde me he mostrado regular y consciente de mis posibilidades. Lo peor: mi caída porque tuve miedo y pensé que podía ser más grave», dijo el corredor del US Postal.Armstrong quiso destacar también la importancia de esta victoria y del papel desempeñado en la carrera. «Aunque mi cuerpo no ha sido el mismo sobre la bicicleta, lo importante es que he demostrado a mis compañeros que podían contar con el líder del equipo y he asumido mis responsabiliades», señaló.
El estadounidense se deshizo además en halagos hacia sus compañeros de equipos. «Nunca vi al equipo tan bien de forma en junio como este año; no quisiera tener que enfrentarme a un equipo como el nuestro», indicó.