Gregorio Manzano se plantea recurrir nuevamente al doble pivote para suplir la baja de Albert Riera ante la visita de la Real Sociedad. La ausencia demanacorí, que se perderá el encuentro ante los donostiarras para cumplir un partido de sanción por acumulación de tarjetas, provocará el regreso al once inicial de Harold Lozano, que acompañará a Marcos en la dirección del juego y aportará consistencia a la hora de limitar el fluido de la creación realista.
Así lo probó Manzano durante la sesión vespertina de ayer sobre el césped del estadio de Son Moix. La primera plantilla bermellona disputó un partidillo ante el cuadro juvenil que dirige Toni Cazorla y el preparador de Bailén en un principio apostó por desplazar a Ariel Ibagaza hacia el flanco izquierdo y aprovecharse desde esa zona del caudal ofensivo que significa la presencia del sudamericano. Marcos Martín y Harold Lozano conformarían la sociedad principal en el medio campo, aunque el entrenador mallorquinista también probó con Ibagaza en la parcela central, dejando caer al jugador mallorquín hacia el costado izquierdo.
La ausencia de Albert Riera obliga a Manzano a variar su dibujo con respecto al que hizo historia en el Bernabéu y lo hace en una posición especialmente problemática ya el canterano no cuenta con un relevo natural dentro del plantel. Su caída de la alineación provoca una variación importante en la predisposición táctica de los isleños, aunque la vuelta de Lozano al equipo amortigua la preocupación del técnico ya que le permite conformar un once capaz de plantear mucha batalla a la Real Sociedad.