Amador Pons/Fernando Fernández
Palma prepara estos días el gran desafío de la vela balear. El Real
Club Náutico de Ciutat ha puesto en marcha la maquinaria para
tratar de conseguir que la próxima edición de la Copa América se
dispute en aguas mallorquinas. Hoy el Comité Promotor de la
Candidatura de la Ciudad de Palma visita el Consolat de Mar para
recibir el apoyo de todas las instituciones (Govern, Consell y
Ajuntament) y para decidir las personas que formarán el grupo que
viajará a Suiza para conocer las condiciones necesarias para
albergar esta prueba.
La Copa América es una competición que deja importantes beneficios para la ciudad organizadora, pero también es una maquinaria que necesita una infraestructura considerable. El Club Náutico de Palma ha diseñado un dossier orientativo de dónde podría organizarse la prueba -el Muelle Viejo es la primera opción- pero espera conocer las condiciones que demanda el sindicato suizo.
Antes de que finalice el mes de marzo una expedición viajará a Suiza para reunirse con Bertarelli. En la reunión de esta mañana en el Consolat de Mar se decidirá quién viaja finalmente para celebrar ese encuentro. Hay dos opciones: la primera es que se desplace un emisario y entregue el dossier, mientras que en la segunda opción los responsables del CN Palma contarían con el respaldo de los responsables de las instituciones.La opción de Palma es una de las que cuenta con mayores probabilidades de ser elegida. El hecho de que la Familia Real disfrute de sus vacaciones en la Isla y que participe en las competiciones que se realizan en la bahía palmesana ha permitido que el proyecto isleño cobre cierta ventaja. El embat (viento de la bahía) de entre 10 y 20 nudos es otra de las grandes acreditaciones.
Las tres grandes candidaturas que pueden terminar con el sueño de Palma son Cádiz, Barcelona y Cascais. Cádiz cuenta con un gran escaparate en el Mundial de clases olímpicas que se celebrará en 2003, además de contar con un gran presupuesto. Cascais tiene en la infraestructura y en el mar abierto sus principales avales. Mientras que Barcelona aspira a recuperar el espíritu olímpico para poder ser la sede en 2007.