La aparición del Espanyol por el choque fue notable. Confiado el balón en las botas de Iván de la Peña, las arrancadas de Maxi por la derecha se clavaron como puñales en la defensa del Mallorca. El argentino, un tipo descarado en el quiebro y extraordinariamente vertical, dinamitó el primer cuarto a base de carreras, y los baleares sufrieron. El equipo de Manzano se atrincheró en torno a Leo Franco y los de Clemente lo agradecieron. De la Peña clavó un derechazo en el palo en el minuto 8, y fue entonces cuando el grupo isleño reaccionó. Riera empezó a tener más presencia en el juego de ataque, aprovechando la debilidad de Fredson a la hora de arremangarse. El de Manacor lanzó una volea a renglón seguido (minuto 13) y Marcos disparó fuera poco después tras un servicio del centrocampista mallorquín (minuto 16).
El Mallorca empezaba a sentirse algo más cómodo, porque Ibagaza entraba en contacto con el cuero y Lozano había echado el cierre en el círculo central. Paradójicamente fue entonces, cuando los rojillos tenían más presencia, cuando llegó el gol del Espanyol; Tamudo recibió un pase en profundidad, le ganó la espalda a Vicente, y fusiló a Leo Franco de tiro alto (minuto 31). Los jugadores bermellones protestaron una falta sobre en el origen de la acción que supuso el 1-0.
Pese a los intentos por contener la hemorragia que hizo Pandiani -lanzó dos disparos en tres minutos- el conjunto bermellón estaba malherido y Oscar rascó en la herida; Domoraud le ganó un balón aéreo a Riera y el delantero catalán, que volvía a jugar un buen puñado de meses después, se adelantó a la salida de Leo Franco (minuto 45). El partido se empinaba.
Iván de la Peña continuó en el segundo tiempo impartiendo un clínic de pase corto y dinamismo, y el Espanyol estuvo cerca de rajar el partido. Los desmarques de Tamudo y la zurda de Roger acercaron a los españolistas al tercer gol, mientras Pandiani seguía encontrándose con las manoplas de Toni cada vez que diseñaba un escorzo. Las zancadas de Riera alimentaron la esperanza de que el Mallorca podría limar distancias, pero el equipo nunca encontró al mejor Ibagaza y eso se notó.
Viendo que el partido no se alteraba, Manzano empezó a pensar en la Copa y tiró de banquillo para darle aire al vestuario.
Marcos Martín se perderá la cita del próximo domingo ante el Real Betis Balompié en Son Moix. El centrocampista mallorquín vio la quinta cartulina amarilla tras realizar una falta en el centro del campo y no podrá jugar ante los verdiblancos por sanción. Gregorio Manzano perderá al balear para el importante encuentro ante el conjunto de Víctor Fernández. Sin embargo, el Mallorca recupera al delantero camerunés samuel Etoo, que no pudo jugar ayer en el Lluís Companys ya que también cumplía el ciclo de cinco amonestaciones. El equipo podrá recuperar su dibujo habitual.