Gregorio Manzano puso ayer la guinda a una semana marcada, primero por las críticas de los jugadores hacia los colegiados, después por le hermanamiento con este colectivo por parte del presidente y ayer fue el entrenador quien hizo suyas las palabras pronunciadas por Alemany el jueves y también hizo las paces con los colegiados de Primera.
El técnico de Jaén aseguró que «los árbitros no persiguen al Mallorca», aunque sí reconoció que «objetivamente, el Mallorca ha sido perjudicado estas últimas semanas». Manzano apuntó que es necesario un «acercamiento con los colegiados y que no sean un mundo aparte como son ahora». Sobre circunstancias claras como el penalti en contra señalado en el partido de Copa en Riazor cuando Tristán se tiró en el área, Manzano apuntó que «quiero pensar que Esquinas ahí actuó políticamente, pero no quería hacer daño a mi equipo. Como he dicho no hay ninguna persecución, es cuestión de rachas, como los goleadores, en ocasiones son buenas y otras malas», dijo. El entrenador afirmó estar en concordancia con lo manifestado por Alemany y añadió que «la mala racha de resultados no se corta con una crítica», explicó.
Al ser preguntado por las manifestaciones que realizó en su día contra Rafa González, del que dijo que «tiene más peligro que un mono con dos pistolas», Manzano aseguró que su intención no era «insultar» al línier y añadió que «se trató de una expresión castiza, sin ánimo de ofender». Manzano destacó una vez más que en el vestuario se les ha vuelto a decir a los jugadores que no protesten las decisiones arbitrales y afirmó respecto a las numerosas expulsiones que, «este tema tenemos que controlarlo más», declaró el preparador mallorquinista. Alemany llamó la atención al equipo sobre esta cuestión que tantos problemas ha causado estas semanas.En el plano deportivo, Manzano decidirá entre hoy y mañana qué once titular jugará ante el Athletic Club de Bilbao. El técnico de Jaén dio a entender que alineará de inicio a Vicente Fernández pero, por el contrario, no sabe si podrá disponer del delantero Samuel Etoo, ausente toda la semana de los entrenamientos debido a los problemas estomacales que ha sufrido.
Respecto a la alineación de Vicente, después de un año y medido de caer lesionado, el técnico apuntó que «si el jugador está dispuesto, jugará», manifestó. Manzano recordó que Lussenhoff ya tuvo que entrar en el equipo en un momento de necesidad y cuando todavía no estaba recuperado del todo de su lesión. «Cualquier jugador que está de alta -señaló Manzano- lo está a todos los efectos y ahora no hay amistosos para ir dando minutos», explicó el preparador de Jaén. El hecho de que el defensa central pueda regresar al equipo titular repercutirá directamente en uno de los grandes protagonistas esta semana, Miquel Soler. El lateral, en caso de jugar frente al Athletic Club, cumplirá su partido 500 en Primera División, aunque tras los últimos entrenamientos, la opción de que Miquel juegue pierde enteros. El preparador jienense apuntó, sin embargo, que «esta semana vosotros -refiriéndose a la prensa- habláis mucho de Miquel y él se lo merece ya que es un gran jugador que ha aportado muchas cosas al fútbol y al Mallorca», explicó el técnico bermellón. La última palabra, por lo tanto, la tiene el central catalán, que si bien no está al cien por cien, sí tiene muchas ganas de volver a los terrenos de juego, y más después de un año y medio alejado de los terrenos de juego.