Ginés Hernández, presidente de la Peña Madridista de Cala Murada, ha acusado a la actual cúpula de la Federación de Peñas de irregularidades contables y falta de traspararencia en la gestión económica de este organismo, en el que durante los últimos años ha desempeñado funciones de secretario. Hernández, en una nota remitida a esta redacción, responsabiliza al actual tesorero -Matías Lladó Cerdá- de «haber hinchado una factura en 200.000 pesetas».
Ginés Hernández Guerrero, que el pasado 9 de noviembre fue declarado por la propia asamblea de la Federación de Peñas Madridistas de Mallorca persona «non grata» -en la misma convocatoria se acordó también la expulsión de la peña de Cala Murada-, subraya en su escrito que todas estas medidas se adoptaron «pocos días después de que solicitara por escrito que me entraran las cuentas. Mucho antes de que se precipitaran los acontecimientos, mantuve diversas conversaciones con el presidente Agustín Seguí Grau y el propio tesorero, pero estos siempre se han negado en rotundo a mostrarme las cuentas sin causa ni justificación alguna. A mi no me cuadran los números, máxime después de que el propio tesorero manifestara que había hinchado una factura en doscientas mil pesetas».
Agustín Seguí Grau, por su parte, restó cualquier tipo de credibilidad a las denuncias del ex secretario de la Federación de Peñas y evitó polemizar «con una persona que desgraciadamente está enferma y que fue expulsado por moroso. Adeuda a la Federación 4.880 euros (algo más de ochocientas mil pesetas) y no había manera de que saldara esta deuda. Las cuentas que pedía las había aprobado él y si denuncia irregularidades lo que tiene que hacer es aportar documentos y dirigirse a los juzgados. Acudir a los periódicos para difamarnos no tiene ningún sentido».