La plantilla del Real Mallorca tampoco se resigna a pensar que el error de Esquinas Torres puede quedar impune. Miquel Soler, uno de los veteranos del vestuario, se pregunta por qué no actúa de oficio el Comité de Competición para sancionar lo que entienden es un grave error.
El lateral izquierdo del Mallorca comentó que «cuando es tan claro se podría actuar de oficio contra un árbitro porque puede cambiar el curso de una eliminatoria. De un 0-3 a un 2-3 hay diferencia. Ellos avivaron la llama de la esperanza al marcar ese penalti inexistente y el otro en el descuento, pero sobre todo por el error del penalti. Aquí será otro partido. Jugaremos de poder a poder porque ellos siguen teniendo opciones».
Miquel Soler aseguró que el vestuario sigue pensando en la Copa porque «son semifinales. Si fueran octavos de final no le daríamos tanta importancia. Alcanzar la penúltima ronda a un equipo como el Mallorca no le ocurre todos los días. De todos modos no descuidamos la Liga. Tenemos 27 puntos pero hay equipos que nos están acechando y convendría ganar de una vez por todas en casa y recuperar la calma en la Liga.
Respecto al Celta, el defensa manifestó que «llevan una trayectoria un tanto irregular. Pierden en casa, ganan fuera, pero no cabe duda de que son un buen equipo, tiene grandes individualidades. Será un equipo de batir, como siempre lo ha sido.
Miguel Garro, presidente de las Peñas del Mallorca, señaló que «no vamos a colocar ninguna pancarta ni recibiremos a Pérez Burrull de ninguna forma especial porque él no es culpable de nada. Lo que es cierto es que estamos ofendidos por la actuación de Esquinas Torres. Los árbitros tienen que pitar lo que ven, lo dice el reglamento, pero no pudo ver penalti porque simplemente no ocurrió. Además en el partido contra el Celta vuelven a colocar de asistente a Rafa Guerrero que ya cometió errores en su anterior arbitraje en Palma. Nuestra afición nunca se ha caracterizado por ser violenta con los árbitros, pero deberían tener más cuidado. Siempre que el Mallorca va bien los colegiados cometen errores».