El fútbol en mayúsculas se da cita esta noche en el estadio de Riazor. Sobre el verde del campo gallego se enfrentarán dos grandes equipos y con grandes jugadores cada uno de ellos. En un parte del campo estarán los Tristán, Luque, Makaay y Fran. En la otra, y dispuestos a todo, se encontrarán los Etoo, Riera, Ibagaza y Pandiani. La apuesta por el fútbol ofensivo es el denominador común en ambos equipos y no son excesivamente muchos los conjuntos de Primera que puedan ir sacando pecho y vendiendo su producto como lo venden equipos como el Deportivo y el Mallorca.
Por si fuera poco vuelve Juan Carlos Valerón y lo hace convertido en todo un revulsivo para el equipo gallego, aunque no es previsible que actúe de inicio y salga al campo dependiendo de cómo transcurra el choque y de las necesidades de su equipo. Quien no se tomará el lujo de reservar a nadie será Gregorio Manzano, es más, el técnico de Jaén recupera a John Harold Lozano y el equipo que sitúe en el campo será el denominado de «gala».
En el recuerdo de la gran mayoría de los futbolistas del Real Mallorca está todavía la goleada que encajaron la pasada temporada cuando el once de Irureta perdió por cinco goles a cero con tres tantos del ex delantero Diego Tristán. Pero la situación, en estos momentos, es diferente y el equipo rojillo afronta el choque con más confianza y, sobre todo, con la convicción de que haciendo medianamente bien las cosas se puede conseguir un marcador positivo de un estadio tan complicado.
Hablar ahora de la peligrosidad de los jugadores del Deportivo es insistir en lo de siempre estos últimos años y ahí jugará un papel fundamental la defensa del cuadro mallorquinista. Los gallegos disponen del máximo artillero de la Liga, Roy Makaay, que suma ocho tantos, uno por encima de Walter Pandiani. El duelo de delanteros se presume espectacular y más si a la supremacía del holandés se le une la magia de Tristán, la veteranía de Donato, el mando de Mauro Silva y las incursiones por bandas de hombres como Fran, Víctor o Amavisca.