El deporte mallorquín cuenta con una extensa nómina de campeones del mundo en la que las féminas cada vez ocupan un lugar más preemimente. Elena Gómez ha sido la última en incorporarse a un selecto club formado ya por doce mujeres que han brillado en especialidades tan opuestas como la petanca o la bicicleta de montaña. El paso de los años y la consolidación de la mujer en la actividad deportiva tienen su fiel reflejo en esta docena de deportistas que se han ganado un lugar en los anales de la historia del deporte mallorquín e internacional.
Nuria Bover, una de las pioneras en el campo de regatas. La regatista, y actual pareja de «Pepote» Ballester, fue una de las primeras en obtener un título mundial. Fue en 1.989, en la clase 420 y en compañía de la también mallorquina Silvia Summers Bover también fue subcampeona en 470 al año siguiente. Silvia Summers, un nombre para la historia.Su nombre entró a formar parte de la leyenda junto al de Bover. Oro en 420, su trayectoria a nivel internacional no volvió a tener una oportunidad para el lucimiento, pese a sentar un precedente en el deporte de las islas.
Elena Roig, breve paso por la élite mundial de la vela. La deportista del Club Náutico Sant Antoni de la Platja consiguió un oro en la clase Lechner durante su vida deportiva. Miembro de una generación dorada, tocó techo en 1.990 con un éxito que sentaba las bases de una racha que prolongó Jordi Calafat en Barcelona'92. Silvia Gómez y Malén Amengual, la tradición continúa. La hija del mítico Pep Amengual cuenta con una hoja de servicios que redondeó con Silvia Gómez, Jordi Guindos, Bernat Cabot y Antoni García, al hacerse con el mundial por equipos de pesca deportiva en 1.992. Un nuevo éxito para el CIAS, un club plagado de rostros ilustres.
Margalida Mora, un ejemplo de coraje y superación.Un accidente de circulación condenó a Margalida Mora a la silla de ruedas. Su instinto de superación rompió barreras, y la mallorquina jugó un papel importante a la hora de sumar para España en 1.998 el título mundial por equipos en Tiro Olímpico de precisión. Competir en Santander jugó a favor de una deportista que rozó la medalla en los Paralímpicos de Barcelona y estuvo cerca en Atlanta. Brígida Yagüe, una trayectoria breve, pero bastante intensa. El Taekwondo balear también ha tenido tiempo de tocar el cielo en su corta vida. Brígida Yagüe, discípula de Eugenio Cuaresma «Orbi», dio el salto definitivo al CAR de Sant Cugat tras coronarse reina de la especialidad en el año 98. De esta forma redondeó la triple corona tras obtener el europeo y el nacional.