Gregorio Manzano realizó ayer un necesario ejercicio psicológico con el fin de intentar aislar a su plantilla de un entorno que día sí y otro también habla de récord y de liderato y que incluso da por hecho que perder o empatar es hoy por hoy un resultado imposible siempre que se habla del Real Mallorca. El entrenador de Jaén se puso serio ante los periodistas y lo hizo pronunciando un discurso exento de triunfalismos y que buscaba prioritariamente hacer ver a todo el mundo que es imprescindible no perder ni la humildad ni el espíritu de sacrificio.
«De cara al encuentro ante el Villarreal se está creando una expectación lógica y esto no puede nublarnos la vista y a partir de ahí querer hacerlo todo bonito. El Mallorca tiene unos medios y éstos son nuestros jugadores y, en definitiva, nuestro equipo, y tenemos un límite, es decir, no somos los Globetrotters del fútbol y si en un momento determinado nos olvidamos del trabajo que hay que hacer en el campo, entonces nos equivocaremos», dijo.
El entrenador del club balear recordó que esta temporada el equipo ha pasado de la nada al todo y que prácticamente no ha habido término medio entre la trayectoria inicial y la actual. «Esta temporada hemos pasado de un extremo a otro y lo que está claro es que prefiero jugar para ser líder que no para evitar el descenso», declaró.
Respecto a la actitud que tomará el Villarreal este domingo en Son Moix, Manzano destacó que el conjunto castellonense vendrá con la intención de trabajar mucho en defensa. «Me temo que basarán gran parte del trabajo en defender. Ellos saben que el día del Sevilla, después de once meses, fue el primer partido en el que no encajaron ningún gol y esto es importante para un equipo que está abajo», subrayó Manzano.