El Nou Camp d'Inca acogerá esta semana el partido más interesante de una atractiva jornada. El Constància de Jaume Bauçà, enfundado con la vestimenta de líder de la categoría, recibe al Poblense en un terreno en el que hasta ahora se ha mostrado inaccesible, pero el cuadro azulgrana llega a la cita cargado de argumentos y con sólo tres de puntos de desventaja con respecto a los inquenses.
El equipo albinegro aumentó su crédito con una seria victoria en el feudo del Santanyí y su candidatura parece clara, mientras que el Poblense se ha ganado un hueco en la zona noble a través de un juego ordenado y un inicio cargado de solvencia.
El otro gran aspirante a recoger el testigo del Atlètic Balears es el Vilafranca de Pep Sansó, que afronta un nuevo capítulo liguero en Magaluf con importantes bajas en sus filas. El conjunto de es Molí Nou ha perdido a José Contreras para los próximos meses por una rotura en la rótula y se une en la grada a Tomeu Ballester, Andreu, Santi Domínguez y Juanito, que tampoco podrán enfrentarse al Playas de Calvià.
El once de Paco Esteban retrodeció levemente en su rendimiento tras caer en Sa Pobla, pero en ningún caso parece un enemigo fácilmente vulnerable. Por el momento, sólo el Peguera le ha arrebatado los tres puntos en casa y la victoria verdiblanca pasa por una respuesta positiva de sus baluartes ofensivos. Por detras en la tabla, llega un Binissalem lanzado tras su paso por Can Misses. Los hombres del Miquel Pons se están asomando a la parte alta como una alternativa fiable a los puestos de liguilla y se cruzan en la décima jornada ante el Cardassar, antiguo equipo del ahora técnico local Pere Vicens.