El delantero argentino Turu Flores se retiró del entrenamiento de ayer debido a unas molestias que padece en el abductor de su pierna derecha. El atacante inició la sesión preparatoria que tuvo lugar en el estadio de Son Moix, tras la foto oficial, pero la abandonó a los diez minutos para «evitar que se produzcan lesiones», según aseguraron ayer los servicios médicos del club mallorquín. A pesar de todo, el cuerpo técnico confía en recuperar al ex deportivista para el encuentro del próximo domingo ante el Atlético de Madrid y todo dependerá de la evolución que muestre el futbolista durante la jornada de hoy y en el último entrenamiento de la semana, previsto para mañana sábado.
Si el delantero no mejora, Gregorio Manzano tendría un problema, ya que Leo Biagini está fuera de servicio por un esguince de tobillo "que le tendrá alejado de los terrenos de juego durante un mes" y Samuel Etoo está sancionado, por lo que Carlos Domínguez es la única alternativa a Walter Pandiani. Campano y Riera, que a principio de semana sufrieron diversas contusiones, ya se han reincorporado al grupo, mientras Miquel Soler ha experimentado una mejoría importante de su sobrecarga muscular y se ejercita con total normalidad, a pesar de que no está al cien por cien. Por otra parte, el central Vicente ya ha finalizado su tratamiento de choque en Barcelona y continúa con la rehabilitación en la Ciudad Deportiva Antonio Asensio.
En cuanto a la segunda plantilla mallorquinista, los servicios médicos del club informaron ayer que todos los jugadores afectados por el brote de gastroenteritis han sido dados de alta y se están ejercitando normalmente con el resto de compañeros a las órdenes de Tomeu Llompart. Hasta 14 futbolistas del filial, más cinco miembros del cuerpo técnico, sufrieron vómitos y diarreas después del desplazamiento a Figueres, lo que obligó a suspender el encuentro ante el Nàstic, que se disputará el próximo 25 de septiembre.