El sueño hecho realidad en El Cairo hace poco más de dos años y medio puede tener continuidad gracias al empeño de dos aventureros con muchos kilómetros a sus espaldas y ganas de hacer algo grande en la carrera más exigente.
El próximo uno de enero partirá de Marsella el Telefónica-Dakar'2003. Será la primera etapa nocturna en un cuarto de siglo de vida de una prueba mítica. Tras dos jornadas en Francia y un paso por España, Castellón marcará el punto de inflexión en vistas al desierto. Túnez, Libia y Egipto pondrán a prueba la resistencia de las KTM oficiales de las que los mallorquines Emilio Rodríguez y Felip Beltrán podrán disponer si no hay un giro radical.
Ambos no se conforman con llegar el 19 de enero a Sharm el Sheikh, sino que, al contar con unas máquinas de garantías, aspiran a estar entre los mejores. En su primera participación, en la edición del 2000, demostraron con unas motos preparadas tan sólo para aguantar que poseen las virtudes que hacen de ellos capaces de ocupar las primeras posiciones. «De hecho, en la última etapa estuvimos entre los treinta primeros, pese al cansancio acumulado», destaca Emilio Rodríguez.