Dos jugadores "Willy Villar y Alberto Alzamora" y un entrenador. No hay más. El Drac Inca abrirá julio sin que su plantilla profesional permita adivinar su nuevo perfil. Jordi Trías y Albert Berenguer, los dos únicos jugadores a los que el club ha servido ofertas, siguen sin definir su futuro y la inminente irrupción en el mercado de clubes con un alto poder adquisitivo incrementa los interrogantes que rodean al nuevo proyecto.
Pero José Àngel Samaniego rezuma tranquilidad. El nuevo entrenador del Inca, que se encuentra en Fuenlabrada "escenario de la segunda Liga de Verano ACB" advirtió que «no estoy nada preocupado; es cierto que me gustaría tener firmado a algún jugador la próxima semana, pero no creo que esto suceda. El mercado se está moviendo, pero están fichando los que tienen mucho dinero y ese no es nuestro caso».
Samaniego, que proyecta incorporar a un máximo de seis o siete nuevos jugadores, reconoció abiertamente que el joven Toni Carrasco entra en sus planes y que el nombre de Rafa Monclova «no es una de mis primeas opciones». El preparador donostiarra desveló que está siguiendo con una atención especial las opciones que ofrece el mercado argentino y que el brasileño Tiago Spliter, que este año ha jugado en Bilbao, podría tener cabida en su equipo.
Al margen de Los Barrios, equipo que días atrás selló la contratación de Steve Payne (Cantabria) y que sólo está pendiente del fichaje de un base y un alero para cerrar la plantilla, el Lobos Cantabria también empieza a cobrar forma. El club gallego ha fichado recientemente al José Antonio Ferrer (Cajasur), al base italoargentino Sebastiàn Ginobili, hermano del jugador del Kinder Bolonia; al también alero argentino con pasaporte comunitario Marcos Nobile (León) y al base nacional Sebastián Arrocha (La Palma).