Con el título en manos del Atlètic Balears y las plazas de liguilla en poder de Constància, Vilafranca y Penya Esportiva Santa Eulàlia, el interés de las dos últimas jornadas del campeonato de Tercera División se centra en conocer los equipos que descenderán a Regional Preferente. Felanitx y Sóller ya han descendido, practicamente, y otros seis equipos podrían perder la categoría.
Sóller está en la situación más compleja. Cuenta con 34 puntos, dos menos que Sporting Mahonés, tres menos que Binissalem, cuatro menos que Arenal y cinco menos que Alaior y Eivissa; y además tiene un calendario difícil. Se mide mañana a las 17 horas frente a la Penya Esportiva Santa Eulàlia, conjunto que ya tiene plaza para jugar la liguilla de ascenso a Segunda División B.
El equipo que podría ocupar esta tercera plaza de descenso es el Sporting Mahonés. El Alaior podría salvarse definitivamente y condenar al equipo de la capital de Menorca a una complicada última jornada si vence mañana en el Municipal de Maó. La penúltima jornada de Liga también ofrece un atractivo Constància-Vilafranca. El partido pierde parte de su atractivo porque ningún equipo necesita los puntos pero servirá como test para medir las opciones de los equipos baleares en una liguilla que lleva demasiados años atragantándose.
En la trigesimoséptima jornada hay otros cinco enfrentamientos sin valor para la clasificación. En los Manacor y Cardassar, Montuïri y Poblense, Ferriolense y Santa Ponça, Santanyí y Espanya, y Playas y Atlètic Balears los equipos no se juegan prácticamente nada. Por otro lado, en el Eivissa-Arenal y en el Binissalem-Felanitx los tres primeros equipos tratarán de evitar cualquier posibilidad de descenso. El Atlètic de Balears visitará Magaluf sabiéndose campeón un año más y tras acceder a las semifinales de la Copa Federación. Los de Benigno Sánchez están consiguiendo los mejores resultados en el tramo final.