El Valencia buscará en el estadio mallorquín de Son Moix encadenar su cuarta victoria consecutiva, un triunfo que esta temporada se le resiste después de haber estado en otras tres ocasiones en la misma disposición. Las tres victorias seguidas logradas ante el Osasuna, Tenerife y Real Sociedad tiene en la presente temporada otros tres precedentes, en los que el equipo de Rafa Benítez no pudo mejorar nunca con un cuarto triunfo. Además, estas rachas de tres victorias encadenadas se han producido cuando el equipo estaba cerca de alcanzar el ecuador de la competición y, sin duda, han sido alguno de los pilares sobre los que se ha sustentado la reacción valencianista que le ha llevado a encabezar la clasificación.
La empresa no será fácil, como lo demuestra el hecho de que el equipo de Mestalla no ha encadenado cuatro victorias seguidas desde hace casi dos años, en la recta final del campeonato de Liga 99-00, con un rendimiento que le sirvió para clasificarse para la Liga de Campeones. En aquella ocasión, el Valencia fue capaz de juntar cinco victorias al imponerse al Oviedo (6-2), Sevilla (1-2), Atlético de Madrid (2-0), Rayo Vallecano (1-3) y Real Sociedad (4-0), igualmente en la recta final del campeonato. En la presente campaña, la resolución de sus seis primeros desplazamientos ligueros con empate y las derrotas cosechadas en los dos siguiente, impidieron al Valencia encadenar siquiera dos victorias seguidas aunque una vez olvidada su condición de 'rey del empate' el conjunto valencianista se ha acostumbrado a los ciclos de tres victorias.
La primera ocasión se produjo en las tres últimas jornadas de la primera vuelta, en las que a la primera victoria como visitante, en la jornada decimoséptima ante el Espanyol (2-3), se unieron las logradas frente al Málaga (2-1) en Mestalla y Betis en Sevilla (1-3). El Madrid, en el Bernabéu, impidió en este caso el cuarto triunfo. El Valencia logró una segunda serie de tres victorias seguidas, ante el Las Palmas (0-1), Athletic Club (2-1) y Deportivo Alavés (1-2), entre las jornadas 22 y 24, si bien de nuevo no pudo sumar un nuevo triunfo al empatar a un gol con el Villarreal. El tercer 'triplete' de los valencianistas llegó ante el Barcelona (2-0), Real Zaragoza (0-1) y Sevilla (2-0) y, aunque la ocasión era la más propicia para sumar un cuarto, en la visita al entonces colista, el Rayo Vallecano, el equipo de Benítez perdió por 2-1 en Madrid.
La recuperación de esta decepción fue inmediata, ya que el Valencia volvía a responder con tres victorias seguidas, precisamente en las últimas jornadas celebradas, ante Osasuna (2-1) en Mestalla, Tenerife (0-1) a domicilio, y Real Sociedad (4-0). Mientras que entre las dos últimas rachas sólo hubo una jornada de separación, entre la primera y la segunda el Valencia acusó un minibache, con dos derrotas seguidas ante el Real Madrid y Real Valladolid (1-2), y entre la segunda y la tercera se produjeron los empates frente el Villarreal y Celta (0-0). Ahora, el Valencia afronta la cita ante el Real Mallorca con la imperiosa necesidad de lograr la tan ansiada cuarta victoria seguida para mantener el pulso con el Real Madrid. Una clave evidente en estas rachas ha sido que el Valencia ha mantenido su solvencia en Mestalla salvo en momentos puntuales -Valladolid y Celta- y ha mejorado su rendimiento fuera, donde ha pasado de ser uno de los peores visitantes a convertirse en el mejor.