78 DRAC INCA: (21+17+21+19): Sergi Grimau (7), Navalón (5), Puyada (14), Alzamora (8) y Green (13) "cinco inicial". También jugaron Montañana (5), Carrasco (1), Villar (2) y Ledbetter (10).
20 de 35 en tiros de 2 puntos. 7 de 14 en tiros de 3 puntos. 17 de 27 en tiros libres. 23 rebotes (13 en defensa y 10 en ataque).
83 COINGA MENORCA: (25+18+10+30): Lino López (7), Rueda (37), Santana (9), Ulyses Morán (5) y Floyd (11) "cinco inicial". También jugaron Catapano (0), Sada (5), Castelló (4), Giannopoulos (0), David Fernández (5).
21 de 35 en tiros de 2 puntos. 4 de 9 en tiros de 3 puntos. 29 de 38 en tiros libres. 20 rebotes (12 en defensa y 8 en ataque).
Àrbitros: Sacristán Barazón (País Vasco) y Pagan Baro (Catalunya). Excluyeron por cinco faltas personales a Grimau, Navalón, Puyada (Inca) y Santana (Menorca). Castigaron con una falta técnica a Ulysses Moran.
Xisco Cruz
Paco Rueda fulminó al Drac Inca y le devolvió la bofetada en la otra mejilla, aquella en la que el equipo de Oliete no había recibido ningún golpe. El escolta del Coinga ametralló a los mallorquines desde el perímetro y se bastó para liquidar el clásico. Anotó 37 puntos en una exhibición de talento y muñeca, en una demostración de solvencia. Ni la irrupción de Green en el arranque del tercer período, ni el ímpetu de Xavi Puyada pudieron reflotar a un Inca que exhibe unas enormes carencias en ataque y que vuelve a complicarse su futuro (78-83). El inicio del Menorca se apoyó en el músculo de Santana y en la muñeca de Rueda. Con la intensidad que siempre destila un equipo dirigido por Quino Salvo, el grupo menorquín abrió fuego con un parcial galáctico (2-11) abofeteando al Drac Inca desde todos los frentes.
Ahora un triple de Santana, luego una penetración de Lino López. Los de Oliete evidenciaban sus carencias en ataque y sólo un triple de Navalón y la entrada de Puyada volcaron la situación. La solvencia del base en defensa y la irrupción en el partido de Ledbetter le bastaron al Inca para limar distancias, entre otras cosas, porque el juego interior empezaba a tener equilibrio. Green falló todo lo que tiró en el primer cuarto y los de es Raiguer necesitaban puntos en la pintura. La falta y técnica de Morán alivió algo el tránsito del Drac Inca por el encuentro y los tiros de Puyada le devolvieron al partido (21-25). Las faltas personales diezmaron al Menorca en el segundo cuarto y el banquillo mallorquín mejoró algo el aspecto del clásico. Las penetraciones de Bordas y el tiro de Puyada le devolvieron la sonrisa al Inca, que tomó el mando de las operaciones (30-28).
Pero entonces Quino Salvo echó mano nuevamente de Rueda y el Coinga Menorca "con la aportación en el perímetro de Adolfo Sada" volvió a coger aire para marcharse al descanso con ventaja (38-43). La apertura del segundo acto sirvió para constatar que Green estaba en el partido; falló tres lanzamientos consecutivos, clavó tres tapones y metió tres canastas. Capitalizó la reacción del Inca (56-50). El Menorca acusó la baja de Ulyses Morán en el juego interior y los errores de Rueda, y el conjunto de Oliete fue capaz de manejarse en el partido con ventajas que siempre oscilaban en torno a los seis puntos. Fue entonces cuando Salvo puso a su equipo a defender en zona y el Inca se atascó. Floyd, Rueda y Santana volvieron a escena, el Coinga Menorca ganó en fluidez y volcó el encuentro (61-68).
La dirección de Lino López y los triples de Rueda consumieron a los inquers, que seguían fallando opciones en ataque. Con el gobierno del partido en Menorca, el Inca se desquició; Grimau, Navalón y Puyada fueron excluídos y Rueda engordaba sus números desde la línea de personal. Los menorquines tuvieron suficiente con manejarse con cierta solvencia en un final apretado y los puntos de Rueda acabaron acribillando a un Inca que agoniza de nuevo.