Si la opinión de los inquilinos de los banquillos LEB tiene algún tipo de ascendencia, el Drac Inca logrará invertir el patético guión que ha redactado en sus últimas apariciones por el Palau. En plena cuenta atrás del clásico balear, la mitad de los entrenadores de la Liga apuestan a favor del grupo de Oliete; cinco de ellos auguran un partido abierto y sólo Pedro Martínez y Joan Maria Gavaldà consideran que el Menorca Bàsquet se llevará el duelo.
En la encuesta elaborada por esta redacción "José Luis Oliete y Quino Salvo han quedado al margen", los preparadores han incidido en que el hecho de que el partido se juegue en Mallorca puede resultar determinante. Incluso Miguel Àngel Martín, Josep Maria Oleart y Ricard Casas "tres los cinco entrenadores que no se han definido" han subrayado en su exposición que el influjo del Palau puede tener mucho peso.
Josep Clarós, Salva Maldonado, Andreu Casadevall y Santiago Gisbert manejaron argumentos similares y coincidieron a la hora de señalar que el baloncesto del Menorca pierde consistencia en las afueras de Maó. Paco Olmos apeló a su condición de antiguo entrenador del Inca para sentenciar que «la victoria se quedará en casa; es lo que deseo», aunque Pedro Martínez, que dirigió a la primera plantilla blanquiazul en la temporada 99/2000 también hizo lo propio: «espero que gane el Menorca Bàsquet».
Julio César Lamas y Juan Díaz consideran que en este tipo de partidos «los pronósticos son imposibles». El estreno del estadounidense Allen Ledbetter en la escuadra local es un aspecto que no ha pasado desapercibido por los entrenadores, aunque ninguno de ellos considera que vaya a ser un factor desequilibrante: «Acaba de llegar».