La preocupante situación por la que está atravesando el Real Mallorca, desde el punto de vista económico, puede verse agraviada si, como anunció ayer el capitán bermellón, los jugadores deciden denunciar sus contratos ante la Liga si la entidad no encuentra los recursos necesarios para abonar las fichas a todos los futbolistas antes de que finalice la temporada. Además, tampoco se han pagado las primas de la Champions ni las cantidades relacionadas con los derechos de imagen. Hasta la fecha sólo se han pagado las nóminas y nadie ha visto un euro de la ficha que habitualmente se suele pagar en tres plazos.
Dos de ellos se deberían haber abonado ya, circunstancia que no ha ocurrido y, si bien Soler dijo que «la Liga todavía no ha terminado», dando a entender que hay tiempo por delante para pagar todo lo que se debe, también añadió que si al término de la Liga la deuda persiste, los futbolistas serán libres de denunciar esta irregularidad. «Las temporadas se liquidan el 30 de junio, este es el día máximo que tiene el club para liquidar los contratos. Es cierto que tenemos plazos establecidos para fraccionar el pago de las fichas y no se han abonado pero los sueldos están al día», manifestó Soler.
«Si el día uno de julio el club no lo ha liquidado todo, me imagino que la Liga de Fútbol actuará y los jugadores que no hayan cobrado denunciarán sus contratos, pero repito que hay tiempo hasta el 30 de junio para cerrar estos temas», subrayó Paco. La noticia publicada ayer por Ultima Hora causó un fuerte impacto en el entorno del club y en el seno de la propia entidad ya que el hecho de no poder hacer frente a diferentes pagos refleja el estado crítico por el que atraviesan las arcas de la entidad que, si bien históricamente siempre ha padecido estos problemas, ahora se han visto mucho más agravados.
Soler también añadió que «lo importante que es el sueldo lo estamos cobrando, lo demás es insignificante y más en nuestra situación», dijo el representante oficial de los futbolistas. La propiedad del club no quiere aportar más dinero por lo que será la propia entidad quien deberá encontrar la manera de salir de una situación tan dramática como esta. Además del déficit que se tendrá al término de la Liga, hay que tener también en cuenta la importante inspección de hacienda a la que se ve sometido el club y cuyos resultados desprenden que el Mallorca debe pagar una cantidad que ronda los 2.000 millones de pesetas.