Con su armamento sensiblemente dañado, especialmente dentro de la pintura, el Drac Inca asume esta noche un partido clave en Madrid. Casi bajo mínimos, el cuadro de Oliete se verá de nuevo las caras con la Universidad Complutense, un rival sobre el que se tomó impulso en la primera vuelta de la fase regular y que aparece de nuevo en un momento delicado para la escuadra mallorquina. Dos derrotas consecutivas "Tenerife y Alicante" han dejado al Inca al borde del precipicio. Es un aspecto que parece haber pasado inadvertido porque el «caso Stuckey» lo ha eclipsado todo, pero que está ahí.
Los problemas físicos de Miguel Alberto Montañana y la fallida incorporación de Lázaro Borrell han dejado mutilado el juego interior balear. De hecho, si se confirma la baja del pívot valenciano "anoche debía decidirse si era incluido en la convocatoria", Oliete sólo podrá contar con Kenny Green y Alberto Alzamora. Y los partidos suelen ser muy largos. Ante esta tesitura, está claro que los exteriores asumirán de nuevo máximo protagonismo. Ocurrió durante muchas secuencias del duelo ante el Alicante, donde Juan Miguel Navalón y Sergi Grimau ofrecieron su mejor repertorio.
Los números indican que la Universidad Complutense no se encuentra en un buen momento. Se encuentra instalado entre los ocho mejores, pero ha acumulado tres derrotas consecutivas y su baloncesto ha perdido fiabilidad. No obstante, en su pabellón es donde ha cosido gran parte de sus éxitos. Miguel Àngel Martín cuenta con una plantilla repleta de experiencia, aunque del gran puñado de ex jugadores de Estudiantes que aparecen en la nómina de la Complutense, es Asier García quien está brillando con luz propia.
El pívot colegial, que no ha tenido problemas para afianzarse entre los máximos anotadores de la Liga LEB, es una de las principales referencias de su equipo. La otra es Edwars, un escolta americano con buena mano y que desquició a la defensa del Drac Inca en el partido que disputaron ambos equipos en el Palau d'Esports. Joe Alonso no se encuentra en un buen momento de forma y Quique Bárcenas alterna buenos partidos con actuaciones decepcionantes.