¿Cuándo llega Kenny Green? Es la pregunta del millón y en el Drac Inca nadie es capaz de dar una respuesta. Inquietante. Desde que se cerró el fichaje del pívot estadounidense, su incorporación se ha ido retrasando hasta provocar la más absoluta confusión. Primero debía llegar el lunes, después el miércoles y ahora no se sabe. Pocos clubes profesionales hubieran tolerado esta situación; simplemente se rescindiría el contrato y se incorporaría a otro jugador. La situación del Drac Inca es especialmente delicada. El viernes disputa un partido clave en Melilla, pero es bastante probable que lo haga con un solo extranjero porque nadie sabe si Kenny Green llegará a tiempo.
Otro aspecto a tener en cuenta es que la normativa actual exige tramitar la licencia de cualquier jugador cuarenta y ocho horas antes del día del partido. Quizás Green llegue a tiempo, aunque la intención inicial del Drac Inca "consciente de que ha apostado que por un jugador que lleva más de un año alejado de la competición" era la de comprobar el estado físico del jugador, verle entrenar y decidir después si le inscribía. Ante la tesitura actual, todo se ha ido al traste.
El vicepresidente Joan Rubert, que desde hace varias semanas ha asumido máximas competencias en materia de fichajes, aseguró a esta redacción que «el club no tiene ninguna culpa de lo que está pasando. Según nos han dicho, el problema está en que el jugador ha perdido el pasaporte, pero es un tema que debía solucionarse».