No hay acuerdo entre Veljko Paunovic y el Real Mallorca. El agente del jugador, y ex futbolista del Atlético de Madrid, Juan Manuel López, mantuvo una larga reunión con el presidente bermellón, Mateo Alemany, y manifestó a Ultima Hora que ambas posturas están, en estos momentos, bastante alejadas. El representante aseguró que «todavía no hay acuerdo, quedan bastantes flecos por resolver y veremos qué ocurre la semana que viene», declaró López. Ambas partes quedaron en volver a encontrarse después del partido que el equipo isleño jugará contra el Hajduk a fin de intentar resolver los últimos problemas que han surgido.
«Hay que solucionar varias cosas y todavía no hay nada. Veljko tiene muchas ganas de venir y creo que al final no habrá ningún problema pero por ahora no hay nada», explicó el representante a este periódico. Entre el Atlético y el Mallorca no hay problemas. El futbolista jugará en Palma como cedido y después los derechos federativos estarán repartidos al cincuenta por ciento entre ambas entidades.
Los inconvenientes han surgido a raíz de las negociaciones entre Mallorca y jugador para delimitar los puntos del contrato que le unirá a la entidad rojilla. «Paunovic está loco por venir y muy ilusionado pero de momento hay bastante distancia entre el Mallorca y nosotros», insistió una vez más Juan Manuel López. Paunovic no cuenta esta temporada para Luis Aragonés ya que, su condición de futbolista extranjero, limita mucho al técnico de Hortaleza que ha recomendado a su presidente que le busque equipo al interior yugoslavo.
La mejor salida tanto para Veljko como para el Atlético es que el futbolista juegue en el club balear pero, por el momento, las posturas distantes impiden que esto pueda suceder. Sin embargo es previsible que la parte del jugador ceda en sus pretensiones ya que, de no ser así, Veljko podría pasarse el año en blanco y no jugar ni en el conjunto rojillo ni tampoco en el Atlético de Madrid. Por otra parte sigue también sin definirse el fichaje del lateral izquierdo del Valladolid, Alberto Marcos. El defensa está también decidido a venir al Mallorca pero el problema radica en la elevada cifra que pide por él su club de origen. Una cifra que ronda los seiscientos millones de pesetas y que intenta rebajar el presidente Mateo Alemany.