Las cosas del destino han encasillado al filial mallorquinista lejos de su hábitat natural. El Mallorca B, que estrena dirección técnica de la mano de Tomeu Llompart, ha sido incluido en el grupo IV de Segunda División B, en el que equipos murcianos, andaluces y norteafricanos (Ceuta y Melilla), se cruzarán en el camino del segundo equipo rojillo.
Ese laro peregrinar por el sur de la geografía española se iniciará el dos de septiembre en el estadio Lluís Sitjar, donde los de Llompart recibirán a un histórico que busca desde hace años salir del pozo.
Sin lugar a dudas, el Granada es, junto al Cádiz, el ilustre por antonomasia del grupo, y será una buena piedra de toque para un filial plagado de caras nuevas. El primer desplazamiento se llevará a cabo siete días después, y será a Dos Hermanas. El cuadro sevillano marcará el punto de partida de una temporada en la que los largos viajes pueden pasar factura al grupo de Llompart.
Como muestra, en la cuarta jornada, los bermellones se desplazan a Ceuta, por tierra, mar y aire, para rendir visita a otro de los equipos de mayor potencial. Otro gran partido aguarda en la quinta jornada de competición. El Sitjar se vestirá de gala para recibir a un Cádiz que se quedó a las puertas del ascenso hace tan sólo unas semanas. Acto seguido, una complicada salida a Jerez, un nombre más con solera a añadir al listado. Por otra parte, el Mallorca B no será el único filial.