El Real Mallorca sigue la estela de la Liga de Campeones al derrotar al Real Zaragoza por 2-1, con goles del delantero catalán Albert Luque marcados en la primera parte. En un partido marcado por el recuerdo del propietario del Mallorca, Antonio Asensio, fallecido el pasado 20 de abril, los «rojillos» dieron otro paso más en sus aspiraciones europeas ante un rival que acusó en exceso las bajas. El equipo balear cobró ventaja en el minuto 7 tras el gol de Albert Luque y, a partir de ese momento, el encuentro entró en una fase de dominio local que se vio interrumpida a partir del minuto 25, cuando el Zaragoza quiso demostrar que no iba a ser un convidado de piedra en Son Moix.
Ambos técnicos, Aragonés y Costa, tuvieron que apelar a jugadores poco habituales debido a la bajas de Engonga, Leo Franco y Carreras, en el lado isleño, Esnaider, Juanele y Sundgren, por parte aragonesa. Ello propició el debut en la Liga del meta internacional argentino Germán «Mono» Burgos, que se situó bajo los palos 18 meses después de haber jugado su último encuentro, en el mes de octubre de 1999 en el estadio de Montjuic ante el RCD Espanyol. El Mallorca contrarrestó con más eficacia que su rival la lista de bajas y el equipo se mostró cómodo y muy expeditivo en los metros finales, con Luque en plan estelar, ya que marcó los dos goles de su equipo en la primera parte, ambos de cabeza. El Zaragoza arriesgó más en la reanudación y su técnico decidió hacer una triple sustitución en el minuto 66, dando entrada a Cuartero, Aragón y Marcos Vales por Lanna, Vellisca y Montenegro, respectivamente.
La mejor oportunidad para los visitantes la tuvo Paulo Jamelli en el minuto 62, cuando no pudo rematar el balón en la misma línea de gol. El Mallorca jugó con mucha tranquilidad los minutos finales apoyado en una renta de dos goles que fue suficiente para asegurar los tres puntos y todas sus opciones de jugar la Liga de Campeones la próxima temporada.