Luis Aragonés tiene un vídeo con los errores arbitrales que le han costado caro al Real Mallorca esta temporada. El técnico de Hortaleza necesitará, si esto sigue así, una cinta más ya que los fallos se van acumulando tanto en la Liga como en la Copa. Lo normal es que al final la balanza de errores y aciertos se equilibre, pero esto, por el momento, no está ocurriendo en el Mallorca. Sistemáticamente a los colegiados, en jugadas dudosas, no les ha temblado el silbato ni la conciencia y han perjudicado con sus decisiones los intereses mallorquinistas.
En el gráfico que apoya esta información se recoge una muestra de los principales fallos que, a la larga, y después de disputarse la primera vuelta, han sido fatales para los intereses del Real Mallorca. La más lamentable actuación la protagonizó Turienzo Alvarez en el partido de Liga jugado precisamente en Balaídos donde ofreció todo un espectacular cúmulo de desaciertos llegando a anular tres goles válidos.
En el club hay mucha preocupación por este tema ya que no se ve «normal» que el equipo rojillo sea constantemente castigado. Al margen de jugadas puntuales, tampoco se entiende el criterio de los árbitros a la hora de sancionar con tarjeta las entradas de los rivales en relación a las faltas que comete el Mallorca.
La gota que hizo colmar el vaso fue la actuación de López Nieto la pasada semana en el partido de cuartos de final. Pitó un penalti de espaldas y permitió a Valery Karpin hacer lo que le vino en gana sobre el césped. A raíz de estos incidentes el entrenador y los propios jugadores explotaron y también la afición demostró su desacuerdo con el colectivo arbitral en el partido de Liga disputado el pasado domingo contra el Valencia.
Mañana pitará Iturralde González y su actuación será seguida con lupa tanto por la afición como por el propio club. El colegiado vasco deberá compartir protagonismo con Valery Karpin sobre el que también recaerá una presión importante ya que la hinchada del Mallorca no olvida sus continuas provocaciones contra los jugadores de Luis Aragonés.