Síguenos F Y T L I T R
Tercera División

La otra Liga del Atlètic

El líder suma 14 puntos más que el Ferriolense y 25 más que el quinto clasificado

|

El Atlètic Balears juega otra Liga, un campeonato distinto. El equipo de Miquel Crespí transita con tanta suficiencia por la Tercera División que, en pleno arranque del segundo ciclo, ya amontona catorce puntos sobre el segundo clasificado y veinticinco sobre el quinto, franja que delimita el acceso a la fase de ascenso.

Es el líder un conjunto mimético en números y objetivos al del curso anterior, pero distinto en contenido. Los blanquiazules han confeccionado una plantilla diametralmente opuesta a la del 99/00, han cambiado sus linajes y su filosofía y su juego tienen otra orientación. No todo se reduce a la inspiración de Anselmo, a las carreras de Cantos o la efectividad de Loren "tal y como sucedía la pasada temporada" y el Atlètic es ahora una plantilla más homogénea y presentable.

La llegada de Manolo Moya le ha dado otra dimensión al equipo, más profesional y más directa. Sus 18 goles en Liga le han convertido en la referencia en el ataque y toda una garantía. Vive en el área y agradece la compañía de Loren, complemento ideal en cualquier esquema. Además, las contrataciones de Paco Pérez, Paco Esteve, Picazo y Juanito le han dado consistencia a la primera línea y el Atlètic es el conjunto que menos goles ha recibido: 12 en 24 jornadas. Gerardo ha recuperado una porción del juego que le llevó hace un puñado de años a la Ciudad Deportiva del Real Madrid, Santi sigue teniendo una enorme presencia en el círculo central y Zamorano ha ganado en verticalidad. Oscar se ha adueñado del flanco izquierdo y Contreras tapa todas sus carencias en defensa. Once equilibrado y salpicado con un banquillo algo más largo que el de años anteriores. Padillo, Garrido, Sergio, Isern o Llistó son alternativas válidas para un conjunto que sólo ha perdido un partido hasta ahora.

El Santa Ponça ha sido el único rival capaz de desquiciar a un equipo que prolonga su paseo militar por la competición doméstica y que además se ha convertido en el epicentro balear en la Copa Federación. La liguilla es otra historia. Allí debe cuajar el proyecto.

Lo más visto