José María van der Ploeg y Rafael Trujillo en la clase Star, y Neus Garriga en Europa, fueron los encargados de dar esplendor a la vela española en la séptima jornada de regatas de los Juegos Olímpicos de Sydney, al conseguir excelentes resultados.
El comienzo de José María van der Ploeg y Rafael Trujillo no pudo ser mejor. Un segundo puesto en la regata inaugural de la clase dio la razón a todos aquellos que los señalaban como una de las mejores bazas españolas para conseguir una medalla en estos Juegos tras los malos resultados de Tornado y la irregularidad de los 470. José María y Rafael parece que no quisieron defraudar y si en la primera lograron ese segundo puesto, en la segunda fueron cuartos, lo que les colocó como primeros provisionales de la clase y dando la sensación de que, además, son unos líderes sólidos que, con permiso de los cambiantes vientos y de sus rivales, pueden continuar dar una gran alegría.
A la fiesta de la clase Star se quiso unir Neus Garriga en la clase Europa, ya que tras los magníficos resultados de hoy se ha puesto en el cuarto lugar de la general, a tan solo cinco puntos de la danesa Kristien Roug y la argentina Serena Amato, segunda y tercera, respectivamente, con 24 puntos. Neus comenzó su mejor jornada hasta el momento con un quinto puesto que la dejaba en esa misma posición en la general, un resultado que estaba dentro de lo previsto para ella, debutante en los Juegos.
Sin embargo, la regatista barcelonesa no quiso dejar pasar la ocasión de sorprender a todos y se hizo un primero en la siguiente regata y, además, con una autoridad fuera de toda duda, ya que se colocó en ese lugar en el paso por la segunda baliza y nadie pudo siquiera acercársele para intentar arrebatarle ese puesto de honor.