El español Roberto Heras (Kelme Costa Blanca), ganador de la 55 edición de la Vuelta a España, declaró que su victoria es un sueño hecho realidad y que se la debe al comportamiento de sus compañeros de equipo. «En la salida de la carrera no había un líder definido debido a la igualdad, especialmente entre Escartín y yo. La suerte se decantó de mi lado y aproveché la situación. El éxito de Kelme, mi éxito, se lo debo a la entrega de mis compañeros de equipo. Es una pena que alguno de nosotros no vayamos a coincidir en el mismo equipo el próximo año. No lo he tenido nada fácil, pues la primera semana de carrera resultó bastante complicada debido al despiste de Albacete. Afortunadamente hemos sabido reponernos y desde entonces todo nos ha salido a pedir de boca», concretó Heras.
El flamante ganador de la Vuelta a España, segundo salmantino en hacerlo "el anterior fue Agustín Tamames en 1975", agregó que sus momentos más difíciles en la carrera fueron en Albacete y Tarragona. «Estábamos alertados de lo que podía suceder camino de Albacete y nos sorprendieron los abanicos. Luego, en Tarragona hice una buena crono, pero las cosas no me fueron como esperaba», dijo Heras.
Las claves de su éxito estuvieron en la montaña. «La reprimenda del técnico Belda tuvo resultados positivos, pues a partir de la crono de Tarragona creo que el Kelme fue muy superior con diferencia».
Roberto Heras añadió que ahora quiere «disfrutar de este éxito y luego pensar en mi futuro. He dejado claro que tengo cabida en el podio del Tour, aunque muchos desconfían de mí en ese apartado. No me preocupa, como tampoco me quita el sueño donde voy a seguir mi carrera deportiva».