"¿Quién es la primera persona que se entera de la respuesta del verano?
"Antonio Asensio. En cuanto tomé la decisión de quedarme hablé con él y le comuniqué que quería seguir en el Mallorca. Luego lógicamente se lo dije a mi familia, estuve hablando un rato con mi padre y después llamé a mis amigos.
"¿Cómo reaccionó su familia cuando le dijo que se quedaba en el
Mallorca?
"Con mucha ilusión porque estaba convencida de que me iba al
Madrid. Lo que no les ha hecho tanta gracia es que sea presidente
del Mallorca, pero lo asumirán rápidamente.
"¿En qué le cambia a uno la presidencia del Mallorca?
"Pienso que prácticamente en nada. A nivel personal he recibido
felicitaciones y también alguna que otra broma. Supongo que lo que
sí ha cambiado mi vida ha sido la decisión de no irme al Real
Madrid. Ahora que ha pasado todo, estoy seguro de que en unas
cuantas horas volveré a mi vida normal, a centrarme en lo que sé
hacer que es el trabajo hacia dentro. Quizá de puertas afuera se
note un cambio en el sentido de que hablaré menos porque en los
últimos meses he tenido que correr con el peso de casi todas las
apariciones ante los medios de comunicación. Uno es consciente de
sus limitaciones y pienso que la representación social e
institucional del Mallorca debe quedar en manos del Consejo de
Administración, compuesto por mallorquines de gran prestigio y
gente muy preparada para ello.
"¿Se ve presidiendo el palco en un partido?
"Es una de las funciones que me tocará hacer y lo tengo
perfectamente asumido. Por norma general soy una persona fría, pero
vivo los partidos con muchísima tensión. Cuando el balón esté en
juego seré un presidente de sangre caliente.
"Usted encarna un modelo de presidente profesional en un club
cuya propiedad no le pertenece. ¿Se ha planteado la posibilidad de
que en un futuro Asensio decida vender y en cómo afectaría eso a su
posición ante los socios y aficionados?
"Por supuesto que sí. Me gusta estudiar bien las cosas cuando tomo
una decisión y es evidente que asumo riesgos. De alguna manera yo
entro en un momento de gran estabilidad del club tanto económica
como deportiva y social. A partir de ese momento asumo una serie de
riesgos. Asensio se encuentra en proceso de recuperación y me ha
comunicado su firme intención de seguir adelante con este proyecto.
En cuanto a los riesgos deportivos, sé perfectamente cómo funciona
el mundo del fútbol y los asumo por completo. Además lo asumo con
alegría. Sé muy bien lo qué hago y no me tiro a ninguna piscina sin
agua.
"Con su marcha al Madrid, que no sólo su familia sino todo el
mundo daba por hecha, se auguraba una profunda crisis institucional
en el club.
"Es un proceso psicológico que se produce cuando hay un cambio de
cierto relieve, pero al que no le doy mayor importancia. Me
satisface que se haya reconocido mi trabajo pero por otra parte me
parece desmedido hablar de crisis. Desmedido e injusto para la
gente que se quedaba. Nunca he creído que fuese imprescindible. De
hecho, uno de los objetivos que me tracé fue que no hubiera nadie
imprescindible. Los grandes clubes son aquellos que están lo
suficientemente estructurados como para que puedan sobrevivir sin
ningún problema si falta alguien, por importante que sea. El
Mallorca tiene esa estructura. Detrás de mí hay un equipo de
trabajo muy importante, un consejo de administración y una
propiedad con un gran grupo empresarial detrás. Cuando Cúper se
marchó poco menos que se predijo el fin del Mallorca y no pasó
nada.
"De los diez años que lleva en el club ¿ha sido éste el momento
más difícil?
"Quizá el más difícil pero no el más duro. La noche que perdimos la
posibilidad de ascender al perder en Vallecas fue muy dura. Yo era
consciente de lo mucho que el Mallorca se jugaba en aquel momento.
El ascenso era básico para el club y fue durísimo. Por contra, el
momento más feliz fue sin lugar a dudas el ascenso, por encima de
la Supercopa y de otras grandes citas. El 29 de junio de 1997 fue
un día muy grande para mí.
"Después de ser presidente del Mallorca ¿qué reto le queda a
Alemany en el fútbol profesional?
"Después de decir que no al Real Madrid no me planteo ninguna
salida del Mallorca; no al menos a otro club de fútbol. Recibir una
oferta del Real Madrid es lo máximo que me podía pasar y soy
plenamente consciente de ello pero he tomado una decisión y no me
veo en ningún otro club que no sea el Mallorca. A partir de ahora
lo que quiero es centrarme en mi trabajo y tratar de hacerlo lo
mejor que sé y con la menor notoriedad social posible porque ya he
comentado que las intervenciones públicas no son precisamente mi
fuerte. En ese aspecto delegaré en otra gente que lo hará mucho
mejor que yo
"¿Piensa retirarse en el Mallorca?
"No. Primero porque no sé cuánto tiempo me dejarán estar en el
cargo y segundo porque no aguantaría demasiados años. Quiero decir
que el fútbol es un mundo durísimo, debes soportar una gran presión
y yo ya llevo once años en esto. Supongo que estaré unos cuantos
más, ya digo que siempre que me dejen y que yo mismo me sienta con
fuerzas, y después me plantearé nuevos proyectos profesionales,
aunque siempre al margen del fútbol.