El Mallorca ha rescatado de su historia a Josemi y Marcos, dos futbolistas criados en la hierba sintética del Miquel Nadal y madurados en el césped del Lluís Sitjar. El club balear presentó ayer a dos incorporaciones con pasado y presente mallorquín, elementos de nostalgia y refuerzos para una plantilla que empieza a cobrar forma.
Marcos Martín de la Fuente (17-09-68, Palma). El centrocampista mallorquín llega a la isla a petición de Luis Aragonés, un técnico que ya lo tuvo a sus órdenes en el Sevilla y que quiere contar con un jugador total para el círculo central: «me gustaría acabar mi carrera deportiva en el Mallorca», expresaba el de Ciutat en la conferencia de prensa en Son Moix. Tras su paso por Cide, Mallorca, Sevilla y Mérida, su regreso a la entidad rojilla supone «un paso deportivo muy importante. A final de la temporada pasada nunca me hubiera imaginado que el Mallorca me llamara y para mí este regreso tiene unas connotaciones deportivas y personales muy importantes. El club está en una buena situación y aquí tengo a mi familia y a todos mis amigos», destacaba Marcos.
José Miguel Pérez Ruiz «Josemi» (17-09-68, Palma). Su periplo en el Lleida le ha abierto las puertas de su casa y el del Rafal regresa al Mallorca afrontando «un nuevo reto». Josemi señalaba que «cuando salí del club no sabía si algún día iba a volver. Sé que hay una gran competencia en el equipo pero quiere hacerme un hueco y se lo voy a poner difícil a Aragonés». Afirma volver cambiado, más maduro y mucho más centrado en el fútbol: «he cambiado en todo, he cogido más experiencia y he madurado mucho como jugador y como persona». Se encuentra en el equipo a Albert Luque, aquel futbolista que le acompañó en el ataque del Mallorca B que ascendió a Segunda.