EFE-HOLANDA
El seleccionador holandés, Frank Rijkaard, quiere aparcar el
triunfalismo que se vive en su país tras el 6-1 logrado ante
Yugoslavia en los cuartos de final de la Eurocopa de fútbol, y
advierte que no será fácil derrotar a Italia ante la euforia que se
ha desatado entre la prensa. La única duda en el equipo holandés
para el partido contra Italia es la de su lateral izquierdo Arthur
Numan, del Glasgow Rangers, que sufre una lesión en un pie.
El joven seleccionador holandés, que jugó la mayor parte de su carrera en el Milán, conoce las posibilidades de la selección italiana, su rival en el partido de semifinales del jueves en Amsterdam. «He leído en los diarios que debemos alcanzar la final y la gente ya habla sobre el posible rival en el partido por el título. Primero tenemos que ganar a Italia, que es un partido muy importante para nosotros. Tras el torneo, podremos decir si lo hemos hecho bien o mal», explicó el técnico. Rijkaard quiere que su equipo no caiga en el triunfalismo. «El partido es muy importante y hay que prepararlo bien. Tras el encuentro contra Yugoslavia dije a mis jugadores que deben ser fuertes, formar un equipo. Hicimos un encuentro maravilloso en cuartos, pero ahora debemos ser más fuertes, apoyarnos y tener los pies en el suelo», explicó.
«Cada partido es diferente y tienes que trabajarlo al 100 por cien y debemos dominar el juego desde el primer momento. Será un encuentro muy tenso. Hay que pulir algunos detalles, pero mis jugadores saben lo que tienen que hacer en general», indicó. La fórmula para Rijkaard es simple. «Debemos hacer nuestro juego, que es ofensivo».