El nuevo proyecto del Drac Inca no parece seducir a nadie. Los esfuerzos del club por retener a algunos de los jugadores más emblemáticos de su plantel han resultado un fracaso, como todas las gestiones que ha realizado desde que concluyó la competición. Rafa Monclova fue el primero en abrir la puerta de salida, la misma que ahora han cruzado Nacho Yáñez y Dani Merchán; tres jugadores que al igual que Luis Merino y Alberto Alzamora, entraban en los planes de futuro de la entidad.
Yáñez, considerado como uno de los mejores aleros de la LEB, ha decidido dar prioridad a su formación académica "tiene previsto cursar estudios de informática" y aceptar la propuesta de la Complutense, equipo madrileño que la próxima temporada militará en la nueva LEB 2. Dani Merchán, por su parte, ha declinado una mísera oferta del Bàsquet Inca y en las próximas horas firmará por Cajasur, equipo que meses atrás dejó fuera de los playoffs a los mallorquines. El pívot catalán coincidirá en Córdoba con Felipe García, otro ex del Inca.
La masiva fuga de jugadores deja entrever el desconcierto que anida en los despachos del club desde hace varias semanas. La negociaciones que abrió el Inca con Miquel Giró, a quien se le propuso el cargo de director general, y Josep Oriol Humet, el hombre elegido para ocupar la secretaría técnica, han sido un fracaso. Giró, ex gerente del Joventud de Badalona, exige un contrato garantizado de tres años, mientras que Humet parece tener su futuro en el Fórum Valladolid.