Mats Wilander escribe una nueva exitosa página en su currículum. El tenista sueco revivió sus mejores triunfos, desplegó un juego extraordinario y se deshizo de Andrés Gómez para conseguir el pasaporte a la final del Mallorca Grand Champions. Wilander se mide hoy con Anders Jarryd, verdugo de un desafortunado Pat Cash.
Cuatro interesantes partidos formaban el calendario de ayer. Todos los encuentros tenían su atractivo y ninguno defraudó. Pat Cash y Anders Jarryd inauguraban la jornada. El jugador australiano era el preferido del público, pero la mejor forma física de Jarryd y el desacierto de Cash en puntos importantes decantaron la partida del lado del sustituto de Yannick Noah. Cash tardó en entrar en la partida y cedió el primer set por 6-1.
En el segundo set Jarryd sufrió más pero se aprovechó de los fallos del australiano para situarse en la final tras ganar por 7-6 (4). Bjorn Borg y Juan Aguilera saltaban a la pista a continuación. Sin nada en juego "los dos habían perdido tanto el viernes como el sábado y no tenían opciones de jugar la final", el público quería despedir como se merece a una de las grandes leyendas del tenis. Borg, que ha anunciado que este año se retirará definitivamente, tampoco pudo con el español, que acabó ganando por 7-5 y 6-3.