28 BM VALLADOLID: Malumbres; Pisonero (7'3p), Raúl González (1), Davis (5), Romero (3), Dasilva (5), Roberto García (6) "siete inicial" Martínez (p.s.), Cortés (-), López (-) y Rodríguez (1).
34 FC BARCELONA: Barrufet; Xepkin (2), Masip (6'2p), Urdangarín (2), Cavar (1), Guijosa (4'2p), Ortega (3) "siete inicial"vensson (p.s.), O'Callaghan (6'1p), Schwarzer (4), Lozano (6) y Paredes (-).
ÀRBITROS: Muro San José (Madrid) y Rodríguez Murcia (Aragón). Excluyeron por dos minutos a Xepkin, Lozano y Cavar, del Barcelona.
EFE - Zaragoza
El Barcelona se proclamó campeón de la XXV Copa del Rey de balonmano por décima vez tras derrotar en la final al BM Valladolid por 28-34 en un emocionante partido en el que el conjunto catalán impuso su mayor potencial ante un rival que nunca se rindió, pero que fue a remolque en el marcador casi todo el encuentro.
La intensidad defensiva del equipo barcelonés tras el descanso, unida al cansancio que evidenció el Valladolid, tras la intensa semifinal contra el Gáldar, fue minando poco a poco al conjunto castellano que no pudo dar la sorpresa tras meterse por primera vez en la final de la Copa del Rey. Además, la presencia de Svensson bajo los palos tras el descanso fue el muro que acabó por hundir a los pucelanos pues el sueco detuvo tres penas máximas en los momentos críticos para su equipo.