I.O.
A falta de todavía medio año para su celebración, los Juegos de
Sidney no dan tregua a Pepote Ballester y Fernando León, actuales
campeones olímpicos de tornado y sólidos candidatos a reeditar un
puesto en el podio. Mallorquín y canario permanecen muy poco en
tierra y lo harán todavía menos a partir de abril, mes en el que
iniciarán una frenética actividad en diferentes campos de regata a
fin de acoplarse a su nuevo barco. Ambos regatistas, que se
embarcarán en el proyecto olímpico de la mano de Mallorca Yatching,
ya han tenido la oportunidad de comprobar la dureza del escenario
donde se jugarán la medalla. Su actuación en el pasado campeonato
del mundo, que se disputó en el mismo escenario donde tendrán lugar
los Juegos de Sidney, se saldó con un discreto noveno puesto. El
resultado del mundial no ha cohibido en absoluto a los dos
tripulantes. "Se trata de un campo difícil y el problema añadido
con que nos encontraremos está en la igualdad que existe entre los
participantes. Estamos siete u ocho países con opciones de medalla
y al final creo que decidirá bastante la suerte que tengamos. En
cualquier caso, somos optimistas porque nos vemos con muchas
opciones", apuntó León.
Vela
Ballester y León afrontan la recta final de su preparación para Sidney 2000
Los regatistas olímpicos presentaron ayer a su patrocinador principal, Mallorca Yachting