80 DRAC INCA: Chambers (18), Merino (11), Monclova (10), Rubchenko (24), Gonzalo Fernández (8) "cinco inicial", Yáñez (4), Felipe García (5) y Dani Merchán (0).
14 de 25 en tiros de 2 puntos. 11 de 20 en tiros de 3 puntos. 19 de 29 en tiros libres. 26 rebotes (20 en defensa y 6 en ataque). 23 faltas personales.
61 ORENSE: Sony Vázquez (6), Guillem Coll (3), Martínez (2), McCann (13), Peñarroya (12) "cinco inicial", Fernández (10), Bernabé (9) y Héctor García (6).
17 de 36 en tiros de 2 puntos. 4 de 15 en tiros de 3 puntos. 15 de 21 en tiros libres. 19 rebotes (8 en defensa y 11 en ataque). 23 faltas personales.
ÀRBITROS: Félix Carrobles (Madrid) y Miguel Palenzuela (Castilla León). Excluyeron por cinco faltas personales al local Rafa Monclova (minuto 36) y sancionaro con una falta técnica al visitante Lluís Martínez.
Marcador cada 5 minutos: (15-7) (31-15) (42-25) (49-30) "descanso" (54-30) (63-44) (68-53) y (80-61) -final.
ALBERT ORFILA
Drac Inca fulminó con lujo a un equipo ubicado en un escalafón superior, agasajó a su hinchada con veinte minutos enormes y agrandó la confusión que proyecta su trayectoria desde que bautizó el segundo ciclo de la fase regular. Entregado a una misteriosa capacidad para transformarse, la misma que le impide instalarse con autoridad junto a los mejores, el grupo de Olmos decidió de forma unánime mostrar su otro yo y tumbar al Orense Baloncesto con la misma rapidez que se consumió el primer acto.
Por si alguien tenía dudas, el Inca dejó claro que sus posibilidades de éxito van siempre íntimamente ligadas a las prestaciones que ofrece Roman Rubchenko y, en menor medida, Jeff Chambers. Acomodado durante demasiadas semanas en la pasividad, el ucraniano reivindicó de nuevo protagonismo asumiendo liderazgo y produciendo muchos puntos (24).
Con una renta de 19 puntos, Drac Inca no tardó demasiado para dictar sentencia. Un nuevo triple de Rubchenko en el minuto 26 de partido incrementó a 26 la renta local (58-32). Fue el prólogo a un pequeño atasco que permitió a los gallegos asustar con cierta timidez (63-47 en el minuto 31), pero el Inca se mostró sólido desde la línea de tiros libres y disipó cualquier tipo de insinuación a un fracaso imposible. Orense se quedó en 61 puntos. Olmos impuso su manual.