La suerte de la quiniela ha recaído este domingo en Baleares. Los dos únicos acertantes del pleno al 15 en la quiniela de la pasada jornada sellaron sus boletos en la administración número 1 de Lloseta y la administración numero 5 de Pollença. Cada uno de los acertantes cobrará más de 131 millones de pesetas.
En Lloseta y en Pollença no se hablaba de otra cosa en la jornada de ayer. Se desconoce el nombre de los premiados o si pertenecen o no a estos municipios. Lo que sí es cierto, según explica la lotera de Lloseta, Antonia Mut, es que, al menos en este caso el agraciado es un particular. Registró un boleto de cuatrocientas pesetas, doble de tres apuestas que relleno de forma manual.
«Hace unos dos meses hubo dos acertantes de una quiniela que fue sellada en el bar de aquí al lado, pero entonces tocó a una peña y estaba mucho más repartido», recuerda, Antonia Mut, que regenta el establecimiento junto con su hermano Joan Mut.
La lotera de la administración número cinco de Pollença, Joana Rotger Martí, explicaba en la mañana de ayer que «aunque oficialmente no sé nada imagino que la quiniela debió echarla un particular porque si fuera una peña ya se sabría».
Las dos administraciones estuvieron ayer plagadas de gente que entraba y salía con boletos de todo tipo en la mano. «¿No me habrá tocado a mí, mira a ver», decía una mujer mostrando una primitiva y es que tratándose de 131 millones de pesetas saber si era lotería, primitiva, bonoloto o quiniela fútbolística parecía lo de menos.
Estos premios son los terceros en importancia de la quiniela que han correspondido a Baleares en la presente temporada de fútbol. Ninguna de las dos administraciones había registrado a lo largo de su historia un pleno al quince de la quiniela.