0 LORCA: Linares (1), Eli (0), Quique (0) Toni (0), Cazorla (0), Recio (0), Edu Silva (0), Mika (0) Julien (0), Jero (0) y Gil (0).
Cambios: Manolo Sánchez (1) por Mika, Albert (1) por Edu Silva y Reginaldo (1) por Quique.
3 MALLORCA B: Miki (1), Buades (2), Rubiales (2), Jacobo (1), Àlvaro Cámara (2), Viale (1), Cordero (2), Julián Robles (2), Güiza (3), Jesús Perera (2) y Jonathan (1).
Cambios: Lobillo (-) por Jesús, Zarandona (-) por Robles y Benjamín (1) por Viale.
ÀRBITRO: Fernández Borbalán (Colegio Andaluz). Amarillas a Quique, Mika, Viale, Robles, Gil, Jacobo, Cordero, preparador físico Pau Albertí.
GOLES:
Minuto 6, Cordero, 0-1.
Minuto 57, Jesús, 0-2.
Minuto 90, Güiza, 0-3.
INCIDENCIAS: Estadio San José. 3000 espectadores.
CAYETANO MONTIEL (LORCA)
El Mallorca B consiguió una amplia y justa victoria ante el Lorca en un partido en el que la superioridad balear fue manifiesta, en especial en la segunda mitad. La capacidad de definición y el mejor hacer táctico del conjunto mallorquinista, junto con el tempranero gol de Cordero fueron las causas de esta clara y contundente victoria mallorquina. Con este resultado el filial mallorquín reivindica un lugar de privilegio en la lucha por los play-off de promoción.
La primera parte fue muy aburrida y sosa. Prácticamente no hubo ocasiones de gol, ni tan siquiera aproximaciones que pudieran despertar algún interés. Los dos equipos se dedicaron a practicar un juego de centrocampismo achicando espacios y no dejando jugar al rival, ahogándole en el medio campo y no permitiendo pensar a los hombres de creación.
El Mallorca B se benefició del tempranero gol de Cordero, de un fuerte chut, desde lejos del área. Por cierto que la curiosidad estuvo en que Cordero es murciano, y que le marcó un gol a Linares, que es mallorquín. El mundo al revés, sin duda. Pero curiosidades al margen, este gol sirvió al filial mallorquinista para poder jugar con más tranquilidad y marcar el ritmo del partido.
A partir de ahí, el Mallorca se dedicó a juntar líneas, presionar en la medular, e intentar robar algún balón para salir a la contra, buscando los desmarques de Güiza y Jonathan. Pero no encontró ocasión para volver a perforar la portería murciana. Por su parte, el Lorca se mostró incapaz de trenzar alguna ocasión de peligro con la que inquietar a Miki.
Los minutos iban pasando y el aburrimiento iba apoderándose de los espectadores que se dieron cita en el campo de San José. Entre el conjunto local, que quería pero no podía, y los mallorquinistas, que con el marcador a favor no arriesgaban lo más mínimo, el partido se perdió en un duelo físico en el medio campo que no permitía a ninguno de los dos equipos avanzar hacia posiciones ofensivas.
En la segunda parte el técnico del filial del Lorca, Benigno Sánchez, que era el que se sentaba de forma provisional en el banquillo, ante el cese el pasado viernes de J. Pedro Ruiz, echó el resto, y con los cambios que realizó intentó darle más mordiente ofensivo al equipo. Pero el Mallorca B no se dejó sorprender y con mucho orden y disciplina, supo jugar muy bien al contragolpe. Así llegaron los dos goles, uno de Jesús, y otro, con el tiempo cumplido, de Güiza. Fueron tres, pero pudieron ser más.