JUAN M. GIEMNEZ
El australiano Robbie McEwen, del equipo holandés Farm Frites, se
impuso con facilidad en el sprint de la tercera prueba de la
Challenge» Vuelta a Mallorca que tuvo su línea de salida en Cala
Rajada y la llegada en Cala MIllor. Robbie McEwen recorrió los 159
kilómetros de la prueba en un tiempo de tres horas, 42 minutos y 45
segundos, a una velocidad media de 42'8 kilómetros por hora. Tras
él se clasificó el alemán Erik Zabel (Telekom), que una jornada más
fue el gran derrotado.
La jornada que se presentaba tranquila fue al final un auténtico ciclón ya que los corredores volaron consiguiendo una media superior a los 42 kilómetros por hora, velocidad un tanto ilógica para los comienzos de la temporada, pero sin duda la ausencia de las grandes figuras propició que los modestos nos e tomaran la etapa abroma y desde el principio fueron muchos los que intentaron la escapada, aunque sin éxito ya que el Kelme realizó un gran control de la carrer apara defender el liderato de Francisco Cabello que una día más lidera el Gran Premio Telefónica. La lucha por conseguir una escpada buena se mantuvo a lo largo de los 150 kilómetros, siendo la más significativa la que se rpodujo a falta de una veintena de kilómetros donde Francisco Tomás García (Vitalicio) saltó muy fuerte y luego se le unieron el holandés Miquel van Kessel (Farm Frites) y el australiano Mathew Hayman (Rabobank), pero que fue abortada por los equipos con sprinters en sus filas ya que la meta estaba demasiado cerca como para consentir una escapada de tres hombres.