A trs puntos de Europa y a cuatro del descenso. El Real Mallorca se encuentra por lo tanto en una situación de equilibrio en la tabla clasificatoria como la gran mayoría de equipos situados junto a él. Tres puntos ante la Real motivarán que el equipo vuelva a oxigenarse aunque una derrota complicaría más la situación.
Fernando Vázquez está luchando contra viento y marea para mantener la situación deportiva lo más tranquila posible pero se encuentra con problemas muy difíciles de afrontar. Sin ir más lejos la plaga de bajas que está asolando el vestuario han motivado que el actual plantel pierda mucho potencial lo que sin duda está motivando que el equipo no consiga consolidarse en los lugares de privilegio de la tabla clasificatoria.
Este motivo y los fracasos de fichajes caros y que tenían que ser resolutivos son handicaps difíciles de superar para un técnico que ha visto como el grupo de jugadores de los que echaba mano ha mermado de manera increible. Comparativamente la pasada temporada estos problemas no fueron ni mucho menos tan importantes. Después de 22 jornadas el equipo estaba ocupando la segunda posición y sumaba 38 puntos, nueve más de lo que actualmente tiene en su casillero. Pero los problemas que tuvo Cúper en el capítulo de lesiones fueron mucho menores en el aspecto deportivo. Ibagaza y Paunovic resultaron los peor parados en materia de lesiones y el argentino tenía muchas más facilidades a la hora de confeccionar un once tipo. Vázquez no puede repetir once y observa como cada semana, bien por lesiones o bien por sanciones los jugadores van cayendo sin que se pueda poner freno a esta plaga. Otro de los problemas reales que ha surgido esta temporada y que de una manera u otra han influido en los resultados pasan sin duda por la intranquilidad que se está respirando en el entorno.