ENVIADO ESPECIAL A MAÓ
73 MENORCA BÀSQUET: Reynés (13), Montgomery (8), Tompkins (8), Pacreu (4), Sabaté (17) -cinco inicial- Morales (19), Ismael Torres (4) y Díaz (0).
19 de 30 en tiros de 2 puntos. 4 de 9 en tiros de 3 puntos. 23 de 29 en tiros libres. 22 rebotes (16 en defensa y 6 en ataque). 23 faltas personales.
67 BÀSQUET INCA: Yáñez (16), Merino (3), Monclova (10), Rubchenko (17), Gonzalo Fernández (6) -cinco inicialChambers (12) y Felipe García (3).
17 de 31 en tiros de 2 puntos. 9 de 21 en tiros de 3 puntos. 6 de 15 en tiros libres. 20 rebotes (12 en defensa y 8 en ataque). 23 faltas personales.
ARBITROS: Afonso Castillo y López Garrido. Excluyeron por cinco faltas personales a Reynés (minuto 37) y Felipe García (39).
Marcador cada 5 minutos: (5-4) (12-9) (18-20) (27-27) -descanso- (35-37) (50-41) (61-57) y (73-67) -final.
INCIDENCIAS: Lleno absoluto en el polideportivo muncipal de Maó. El alcalde de Inca, Pere Rotger, asistió a presenciar el encuentro.
Olmos ganó en la pizarra, pero Martínez lo hizo en el marcador. Un aspecto ingobernable -el corazón- evitó que Bàsquet Inca encontrara enmienda en Maó. Menorca mejoró algo más la hoja de servicios que presenta en los clásicos y dejó atrás a un equipo que acumula demasiadas jornadas pactando con el desencanto. Tres derrotas consecutivas han dejado al grupo mallorquín en una tesitura delicada. El Inca pudo salir rearmado de una cita que proyecto un segundo acto de ensueño y que sólo arrojó conclusiones en los últimos segundos, pero el efecto fue inverso: agudizó su descenso en la clasificación y el plantel recibió otro golpe anímico.
Tras exhibirse desde el perímetro (5 triples en el último cuarto) y levantar el partido (66-67, a falta de 1.50 para el final), Bàsquet Inca acumuló el mayor rosario de desgracias posibles. El aro escupió un lanzamiento de Monclova desde la línea de 6'25 que olía a sentencia; segundos después Felipe García cometía su quinta falta y Sabaté volteaba el marcador (68-67). La posterior acción un ataque precipitado acabó en canasta y tiro adicional para Topkins. El 2+1 fulminó al Inca (71-67), aunque Nacho Yáñez, a falta de siete segundos para el bocinazo final, marró tres lanzamientos consecutivos desde la línea de tiros libres que podían haber dado un nuevo giro al encuentro. Mucho antes, la alternancia defensiva de los visitantes metio al Menorca Bàsquet en problemas. El equipo de Pedro Martínez se vió despojado de su principal arma -la velocidad-, pero respondió al Básquet Inca con una defensa individual durísima e intensa. Entre ambos convirtieron el primer tiempo en un tributo al juego sin balón (27-27) poco agradable para la hinchada. Todo cambió tras el descanso. El circuito Pacreu-Morales ofreció pocas prestaciones, pero apareció Juanmi Morales y un parcial de 10-3 dejó herido al Inca (47-40). Rubchenko soltó la muñeca, pero no pudo con el alma del Menorca.